Seis días después del femicidio de Paola Estefanía Tacacho, y tras haber participado de una multitudinaria marcha en reclamo de justicia, la familia de la profesora de inglés regresó a Salta, su provincia de origen. Pero antes difundieron una carta abierta.
"Hace 13 años miramos a Tucumán como una provincia de oportunidad de estudio y progreso para nuestra querida 'Tifa', hoy la tristeza y la tragedia cambiaron nuestra mirada. Nada volverá a ser lo mismo, y lo que un día inició como un proyecto de vida terminó en una urna fúnebre, encerrando en ella la alegría, el entusiasmo, el compromiso, la responsabilidad, el amor, la vocación y todos los valores que ostentó en cada uno de sus actos", dice el texto.
Sin embargo, aclara que "ni la barbarie de un asesino amparado por un juez y por una familia desentendida, ambos carentes de empatía, de valores éticos y morales, podrán dormir el espíritu libre de quién supo ejercer su profesión con dedicación y esmero".
"Hoy nos marchamos de ésta provincia sin justicia -dice la familia de Paola-, con el corazón y el alma marchitos, pero convencidos de que como familia le entregamos el tesoro más preciado: la oportunidad de conocer, compartir y aprender de quién fuera en vida la muy querida 'Miss Pao'".
"Sólo nos resta agradecer a todos los que nos acompañaron desde el primer momento, comunidades educativas, familias, alumnos, organizaciones sociales, colegas y a los particulares que sumaron sus voces por justicia para 'Pao' y para todas las víctimas de femicidio, desamparadas por la justicia tucumana que asesina mujeres con la firma de fallos basados en argumentos económicos y no en pruebas. Infinitamente agradecidos. Familiares de Paola Tacacho", finaliza el texto.
Previamente, la madre de la víctima, Mariela Tacacho, habló con LA GACETA y remarcó: "el señor Gobernador jamás levantó el teléfono para saber cómo estábamos o en qué nos podía ayudar. ¿Acaso estoy equivocada? Creo que es lo que correspondía”.