El enfrentamiento político entre concejales del alfarismo y de los bloques opositores a la Intendencia trascendió el Concejo Deliberante.
“La nueva mesa del Concejo es la muestra de la alianza entre Bussi-Manzur-Jaldo que gobierna por encima de la voluntad popular, de la militancia y de las instituciones, demostrando que el oficialismo protege a un legislador acusado de abuso sexual porque es uno de los ‘suyos’”, publicó el intendente, Germán Alfaro en sus redes sociales, luego de que los ediles del PJ y del bussismo votaran en conjunto para ratificar la mesa de conducción, conformada por los peronistas Fernando Juri (presidente), Sara Assán (vice primera) y el bussista Eduardo Verón Guerra (vice segundo).
Los seis ediles de la bancada alfarista siguieron ayer la sesión desde la puerta de entrada al recinto. Explicaron que, por la división de bancas, les correspondía la vicepresidencia primera. Aguardaban un gesto del bussismo: que propongan una mesa que los incluya. Como eso no ocurrió, se abroquelaron para achacar la elección de autoridades del cuerpo a un pacto entre el PJ provincial y Fuerza Republicana.
“En el momento en que el Gobierno más necesita del consenso, elige obviar la voluntad popular desconociendo a la primera minoría. Y en cambio le otorga un lugar al bussismo, fuerza que es conducida por un personaje que mayor vergüenza institucional produjo en los últimos años. (El vocal de la Corte, Daniel) Leiva pidió ‘bajar la intensidad’ de la causa (por abuso sexual en su contra) Bussi para esto, para poder usarlo y forzar la voluntad popular expresada en las urnas”, disparó en tres tuits el intendente de San Miguel de Tucumán.
El legislador Ricardo Bussi, quien fue concejal de la capital entre 2015 y 2019, durante la primera intendencia de Alfaro, rechazó esas afirmaciones. “Francamente la postura de los concejales que obedecen a Alfaro es de paciente psiquiátrico. Se ausentan de la sesión y luego piden que los concejales de Fuerza Republicana defiendan su espacio. Ellos deberían dar el debate y defender con uñas y dientes el lugar que les dio la ciudadanía. Pero en lugar de ello se ocultan detrás de las cortinas como niños para luego levantar el dedo acusador”, disparó Bussi. Y agregó: “El señor intendente debe dejar de buscar peleas y ocuparse de la ciudad que, además de ser la que más enfermedades presenta, estuvo paralizada durante 60 días por conflictos con el transporte público de pasajeros, es la más inseguridad de la provincia y la más abandonada. Alfaro, ocúpese de lo que verdaderamente importa, ¡Gobierne la ciudad!”.
“Una chiquilinada”
El presidente del Concejo disparó contra la ausencia del alfarismo en la última sesión. “Ellos tomaron una actitud torpe, infantil, antidemocrática, irresponsable... una chiquilinada. Ellos tomaron esa actitud, nosotros estamos abiertos al dialogo, al consenso, a seguir acompañando al intendente. Para eso estamos esta mesa de conducción y los concejales que la votaron. Los que quieren romper, los que no tienen la voluntad son ellos”, expresó Juri a este diario. “¿A la gente le interesa que hoy estemos peleando por un cargo en el concejo? La gente quiere que nos pongamos de acuerdo y resolvamos cosas, nos vamos a estar peleando por una banquita, por un lugar en la mesa, es infantil, irresponsable y antidemocrática esta actitud. Ni el ejecutivo municipal ni los concejales del alfarismo me han planteado que querían integrar la mesa”, agregó.