La Real Academia Española (RAE) anunció que mediante su "Observatorio de palabras" analiza incorporar a su diccionario el pronombre "elle", que definió como "un recurso creado y promovido en determinados ámbitos para aludir a quienes puedan no sentirse identificados con ninguno los dos géneros tradicionalmente existentes".
Este Observatorio fue presentado por la institución al rediseñar su página web y se define como un espacio que "ofrece información sobre palabras (o acepciones de palabras) y expresiones que por el momento no aparecen en el diccionario, pero que han generado dudas: neologismos recientes, extranjerismos, tecnicismos, regionalismos, etcétera".
Según explican, se trata de información provisional, ya que no está contemplada aún en las obras académicas, por lo que puede verse modificada en el futuro. Y precisan que la presencia de un término en este observatorio no implica que la RAE acepte su uso.
Norma Loto, docente, periodista e integrante del Círculo de Lingüistas Feministas, asegura que no hay mucho que festejar; y explica: "es el observatorio que analiza usos y costumbres, esto no implica ingresar en el diccionario". Y trascartón, cuestionó el eventual reconocimiento de la entidad realista. "Hay que pensar por qué es importante el ingreso a un diccionario que responde a los intereses de la Real Academia Española", dijo.
Loto reflexionó sobre cómo entraría esa denominación, con qué calificación y con qué rótulo. "Necesitamos lenguaje no sexista y no binario, no necesitamos la legitimación de la RAE ni tampoco un diccionario", afirmó.
En ese sentido, recordó el caso de "femicidio". "Se empezó a utilizar con un marco teórico escaso, pero era una palabra que circulaba hace décadas y no esperábamos que ningún observatorio la incorpore, la utilizamos sin ningún diccionario", dijo.
Explicó que el lenguaje inclusivo -el no sexista y no binario- crece y avanza 'in situ'. Es decir, dependiendo de cada sociedad y de sus avances sociopolíticos. "Los cambios van de abajo hacia arriba. El diccionario tiene dos funciones: da legitimidad a las palabras que nosotras utilizamos y legisla, porque dice si esto está bien o no. Entonces hay que ver a qué precio, con qué etiqueta estamos esperando que la RAE acepte la palabra 'elle'", reflexionó la docente universitaria, estudiosa del lenguaje inclusivo.
Entre las palabras que están siendo estudiadas por el Observatorio de la Real Academia Española también están: transfobia, ciberataque, porfa, bot, mutear, logear, videollamada o encuarentenar. (Télam)