Objetan a Sbdar en una carta al Presidente

El legislador José María Canelada cuestionó la actitud de la titular de la Corte Suprema provincial, Claudia Sbdar. En una carta al presidente, Alberto Fernández, el radical manifestó su “profunda preocupación” por la “posibilidad de trasladar el modelo aplicado en el Poder Judicial al ámbito federal”, dado que la jurista integra “Consejo consultivo para el fortalecimiento del Poder Judicial y del Ministerio Público”, creado por el jefe de Estado.

En la misiva, el parlamentario hace hincapié en dos situaciones. Por un lado, la del vocal Daniel Leiva, quien se encuentra denunciado por presunto tráfico de influencias, coacción y violación de los deberes de funcionario público por parte del juez de Impugnación Enrique Pedicone, “pero continúa ejerciendo sus funciones de manera regular”. Por el otro, el vocal Antonio Estofán, quien ha sido denunciado por supuesto acoso sexual por una empleada judicial. Ambos casos, continúa Canelada, “revisten tal gravedad institucional que exigen un accionar dinámico de la Corte Suprema, dejando de lado prácticas burocráticas que dilatan las respuestas que la ciudadanía espera ante semejante crisis judicial”.

“En Tucumán, el Poder Judicial se encuentra capturado por el Gobierno de turno y la inacción de las instituciones ante las denuncias contra Leiva y Estofán sólo son una pequeña muestra de ello. A esta grave crisis se suma el silencio cómplice de la presidenta de la Corte Suprema, que no se manifiesta ni pone un freno a los avances del poder político sobre el Poder Judicial”, cuestionó el opositor.

En la carta, el legislador objeta que ex fiscales de Estado (lo fueron Leiva, Estofán y Eleonora Rodríguez Campos) hayan pasado de del Ejecutivo a la Corte, así como también los “superpoderes” brindados al ministro fiscal, Edmundo Jiménez, quien fuera ministro de gobierno del ex gobernador José Alperovich. “Si los aportes de Sbdar se dan en sintonía con la filosofía del Poder Judicial de Tucumán, el riesgo que corre la justicia nacional es grave. Tucumán atraviesa un gran deterioro en la calidad institucional que merece ser atendido urgente con acciones concretas y con mensajes claros hacia la ciudadanía, que restituyan la confianza perdida”, concluye.