Reunión clave en el COE para tratar de no retroceder de fase en Tucumán

Los intendentes coinciden en que la situación sanitaria de la provincia es crítica. Hay preocupación, especialmente en las autoridades de los municipios del Gran San Miguel de Tucumán (GSMT): el área metropolitana concentra el 85% de los casi 26.000 casos de covid-19 (12.000 activos). Todos están de acuerdo en que hay que actuar para disminuir el ritmo de contagios (las cifras se duplican cada dos semanas). No coincidían, en cambio, en que se decreten restricciones que atenten contra las actividades económicas. Se espera que haya un acuerdo hoy, en la reunión que mantendrán con las autoridades del Comité Operativo de Emergencia (COE) desde las 9.30, en el Centro de Innovación (José Ingenieros 260).

La ministra de Salud, Rossana Chahla, había pedido el martes a los jefes municipales del GSMT que unifiquen horarios del comercio, esfuerzos y que restrinjan la circulación entre jurisdicciones -especialmente desde capital- para frenar el ritmo de contagios. También, mayor contención en las ciudades del interior con contagios por conglomerados para no llegar a la circulación comunitaria. El ministro del Interior, Miguel Acevedo, se puso al hombro la búsqueda de acuerdos, pero hasta ayer algunas autoridades municipales se limitaron a decir que seguían conversando o que era complicado encontrar un consenso.

En Casa de Gobierno también prefirieron no adelantar nada hasta tanto se termine de acordar horarios y medidas con las autoridades municipales. Sin embargo, trascendió que una posibilidad que se bajara es restringir la circulación entre las jurisdicciones del área metropolitana a partir de las 18.

¿Última oportunidad?

El intendente de Banda del Río Salí, Darío Monteros, explicó a LA GACETA que deben ser las autoridades del COE las que dispongan las acciones a tomar en el GSMT. “Ellos son los que han venido llevando el tema y nosotros acatando las decisiones. Es como que a mitad del río nos liberen”, dijo. Consideró también que la reunión de hoy puede ser la última oportunidad para no tener que volver a fase 1. A su vez, opinó que por más medidas que se dispongan, la ciudadanía debe colaborar. “Esto es 50% y 50%. De nada vale que tomemos acciones si no se cumplen. La ola nos va a tapar a todos”, alertó.

El jefe municipal de Las Talitas, Carlos Najar, se manifestó optimista respecto a la unificación de los horarios comerciales en el GSMT, aunque recalcó que de nada sirve si no se hacen cumplir esas disposiciones. “Asumamos el hacer cumplir cada uno las normativas que decretamos. Unificar es sencillo, pero hay que hacerlo cumplir”, dijo a este diario. Y fue crítico, nuevamente, con la capital: “uno sale fuera del microcentro y no hay controles. De nada sirve dictar medidas si no es para hacerlas cumplir”.

Mariano Campero, intendente de Yerba Buena, manifestó que es clave encontrar un acuerdo para actuar en conjunto y remarcó que es clave insistir con la conciencia social. Coincidió en que la situación del sistema sanitario es crítica, pero opinó que no sirve cerrar las actividades de manera precipitada. “Hay que tener previsión. Tengo expectativas de que podamos avanzar en una estrategia”, dijo a este diario.

El radical opinó también que el desafío es bajar los contagios, y que para ello hay que trazar objetivos a cumplir y que la curva de contagios no se duplique cada dos semanas. “No es ‘restricciones versus flexibilizaciones’. Redoblemos los controles. Hay que condenar la irresponsabilidad, ese es el tema”, subrayó.

Otros jefes municipales prefirieron no hacer declaraciones públicas, pero consideraron que reducir la circulación no sería algo efectivo. También plantearon que a pesar del incremento de casos perciben que nadie en el Poder Ejecutivo quiere tomar decisiones que no serán positivas.

El miércoles, el intendente Javier Noguera (Tafí Viejo) había convocado a avanzar hacia “conductas más restrictivas” en el área metropolitana para contener la curva de casos de coronarivus. Su par de la capital, Germán Alfaro (PJS), se mostró en desacuerdo y pidió no dejar de lado las cuestiones económicas. “No fui elegido intendente para ver cómo se cierran negocios en el microcentro. Tampoco para ver cómo la gente se va quedando sin trabajo”, apuntó en diálogo con LG PLAY.