Por Gustavo Rodríguez
04 Octubre 2020
Penal de Villa Urquiza. ARCHIVO LA GACETA / FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
Un joven de 24 años al que le quedaban por cumplir tres años de una condena por homicidio, se transformó en el principal sospechoso de haber acabado con la vida de un preso. Ese fue el mortal resultado de una salvaje pelea que se desató ayer en el penal de Villa Urquiza.
Según las primeras averiguaciones, el enfrentamiento se desencadenó cerca de las 15 en un patio común de las Unidades y 2, donde se encuentran la mayoría de los reclusos condenados.
Del incidente participaron al menos cinco internos del penal, pero hasta el momento se desconocen las razones que originaron el enfrentamiento. No se descarta que se haya producido por el dominio del pabellón o por una cuestión vinculada al tráfico de drogas dentro de la unidad carcelaria.
Según los primeros informes de los peritos, la víctima que fue identificada como José Sebastían Ocaranza, que estaba procesado por una causa de robo. Fue herido con una barra del hierro del ocho en el ojo izquierdo. Personal del servicio penitenciaro lo trasladó de urgencia al hospital Avellaneda, donde falleció al poco tiempo de haber ingresado por las graves lesiones cerebrales que sufrió.
Daniel Leandro Juárez fue individualizado como el principal sospechoso del ataque. Según los investigadores, el joven de 24 años tenía una herida superficial en el abdomen. En agosto de 2015 fue condenado a 10 años de prisión por un homicidio que cometió en septiembre de 2013, cuando aún era menor de edad. Hasta el momento, no gozaba de ningún beneficio por su conducta.
Personal de Homicidios y del Equipo Científico de Investigación Fiscal se presentó en el penal. Secuestraron el arma homicida y recolectaron otras pruebas. La investigación quedó a cargo del fiscal Ignacio López Bustos.
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