Por Rodolfo Casen
15 Septiembre 2020
EL BAR DE LA CONTROVERSIA. El tradicional billar se ubica a 200 metros de la plaza principal, y según sus vecinos allí hubo una multitud. LA GACETA / FOTO DE OSVALDO RIPOLL
Los bares, confiterías, restaurantes y gimnasios continuarán cerrados una semana más en Monteros. Así lo dispuso el Comité de Crisis Municipal, a raíz de la ola de contagios de covid-19 que prevalece en el municipio y que obliga “a tratar de disminuir el índice de circulación del virus”.
Hasta ayer la ciudad acumuló 80 positivos y 82 hisopados en espera de resultados. El hospital General La Madrid tiene tres pacientes internados.
La medida del comité municipal es independiente a la del Comité Operativo de Emergencias de la provincia que a partir de ayer autorizó a los propietarios de confiterías, bares, restaurantes y gimnasios a reabrir sus locales hasta las 23 en la provincia, aunque las autoridades de cada ciudad y localidad tienen la posibilidad de adherir o no a la flexibilización.
El anuncio de la decisión del ente sanitario local fue hecho por el intendente Francisco Serra y desató enseguida la reacción de los empresarios del medio, quienes salieron a rechazarla. Pues todos esperaban retornar al trabajo ayer.
La Unión Comercial e Industrial de Monteros (UCIM) dijo desconocer que la determinación tenga de base un estudio cuantitativo y cualitativo sobre la incidencia de estas actividades comerciales en el crecimiento de la curva de contagio.
La entidad comercial aseguró que mantener la restricción sobre esas actividades comerciales sólo “intenta calmar los ánimos de una sociedad que condena los hechos de público conocimiento sucedidos en el billar (El Ángel), los que naturalmente deben ser investigados y castigados por la justicia”.
Así apuntó elípticamente al campeonato de billar que se habría realizado hace dos semanas en ese negocio, con la asistencia de más de medio centenar de personas, y que disparó los contagios de covid-19 en la ciudad.
En una carta abierta firmada por Aldo Mansilla, presidente de la UCIM, se advirtió que el episodio en cuestión “desnudó las enormes falencias en la tarea de control”. Y remató que con las restricciones al sector gastronómico “una vez más se está intentando tapar el sol con un dedo”.
Serra dijo que en el transcurso de esta semana va a mantener reuniones con los comerciantes damnificados con las restricciones a fin de lograr una solución a la problemática del sector.
Del COE
Pese al enojo de los comerciantes, desde el comité de crisis municipal se insistió sobre la necesidad de disminuir la circulación de personas y del virus frente a la emergencia que se vive. “Cuando la gente menos se contacta con otras, menos posibilidades de contagio hay” advirtió el médico Enrique Racedo, integrante de la entidad sanitaria municipal.
“Estamos en una emergencia social a partir de un hecho puramente sanitario. El virus es de altísima contagiosidad y hoy tenemos una situación de circulación comunitaria”, expresó el profesional. Serra aseguró que la decisión de postergar una semana más la reapertura de los negocios gastronómicos y de los gimnasios fue consensuada con el Concejo Deliberante, los médicos y otros especialistas del Comité de Emergencia.
“Hoy estamos ante una situación muy difícil y necesitamos trabajar en conjunto. Consideramos que, independientemente de lo dispuesto por la provincia, necesitamos siete días más permanecer como estamos hoy, con los bares, restaurantes y gimnasios cerrados”, dijo el funcionario. Admitió que la pandemia “ha impactado muy fuerte no solo en la salud, sino también en nuestra economía y costumbres”.
La médica Andrea Pireda, directora del hospital General La Madrid, habló sobre la necesidad de que la población entienda que el centro de salud está con menos personal por los contagios de profesionales de la salud. Destacó que en los próximos días se va a refuncionalizar el hospital con la llegada de equipamiento para atender pacientes críticos y la habilitación de un espacio cedido por el municipio para la atención y distribución de medicamentos a pacientes crónicos. “El hospital, merced al apoyo del Ministerio de Salud, se transforma en hospital para febriles, posibles covid-19 y críticos. La unidad coronaria va a seguir funcionando tal como lo viene haciendo”, añadió.
El médico Pedro Otonello, del área operativa del Siprosa, se refirió a la situación sanitaria del municipio y observó que ésta “nos ha llevado a buscar nuevas soluciones a problemas nuevos”. Así, reveló la implementación de un servicio de telemedicina con el fin de descongestionar el hospital y también vigilar a los pacientes que se encuentran con covid-19 y aislados en sus domicilios.
Lo más popular
