12 Septiembre 2020
La nuez pecán cae del árbol con una humedad superior a un 15%. Para conservarla se precisa bajarla a un 4% o un 5%.
El técnico de la sección Fruticultura de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) Nicolás Mitrovich presentó los estudios que lleva a cabo el área sobre el cultivo de nuez pecán para Tucumán; sobre sus principales características y requerimientos, y sobre las diferentes etapas fenológicas por las que atraviesa a lo largo de la campaña.
“Se debe tener en cuenta que estamos en una época del año en la que se empiezan a activar ciertos procesos importantes para definir el futuro de la campaña”, dijo.
En función a los datos recabados en la colección situada en el predio que la Eeaoc tiene en El Colmenar, y que sirve de referencia para la zona centro de la provincia, el pecán comienza a brotar en nuestras condiciones -y tras un período de reposo invernal- aproximadamente en la segunda semana de septiembre: inicia su expansión foliar hasta alcanzar el 100% de hojas expandidas en noviembre.
El tiempo de brotación está influenciado por las horas de frío y de calor: cuantas más horas de frío se acumulen en el invierno, menos horas de calor se requerirán en primavera para estimular la brotación, y menor será la variación de la misma entre cultivares.
Polinización
En medio de esta fase vegetativa inicia la fase reproductiva, con la floración y polinización en octubre. La polinización en el pecán se realiza por medio del viento. En algunas variedades el polen se derrama antes que el estigma este receptivo, y en otras maduran primero las flores femeninas. Por todo esto es necesario combinar dos o más cultivares para lograr una buena polinización y el éxito productivo.
Concluida la etapa de polinización continúa el cuajado y el desarrollo temprano de la nuez -entre noviembre y diciembre-, durante la cual se produce la mayor caída de fruta atribuida principalmente a la falta de fertilización del óvulo.
Resulta importante llegar a este momento con un buen estado nutricional del cultivo y óptimo contenido hídrico en el suelo para dar paso a la etapa de rápido crecimiento del fruto, que culmina con el endurecimiento de la cáscara por la punta de la nuez, en enero.
Una vez fijado el tamaño de la fruta comienza el proceso de llenado de esta, que pasa por los estadios: acuoso, gel y pastoso, hasta que se completa. Se debe destacar que esta última etapa es altamente demandante de agua, por lo cual resulta de gran importancia el contenido hídrico del suelo.
Maduración
Durante marzo y abril, la nuez madura fisiológicamente y comienza a desprenderse del ruezno. La cosecha arranca cuando el 70% al 80% de los racimos de nueces tienen los rueznos rajados.
La nuez cae naturalmente del árbol con un contenido de humedad superior a un 15%. Para conservarla se precisa bajar la humedad a valores de entre un 4% y un 5%. De esta forma se estabiliza y se evita la rancidez.
Si bien muchos factores pueden afectar la calidad del producto final, el sistema de cosecha, el acondicionamiento y la conservación hasta su comercialización y hasta su consumo resultan clave para que se cumplan con las exigencias de los mercados.
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