No es una solución milagrosa ni la salvación en medio de la pandemia, pero sí es, hasta el momento, el tratamiento con mejores resultados en gran parte del mundo. Tucumán no es la excepción y desde que se registraron los primeros casos de coronavirus en la provincia, se realizaron 35 donaciones. Cinco de los donantes lo hicieron en más de una oportunidad. Sus anticuerpos fueron empleados en dosis que se transfundieron a pacientes tucumanos pero que también sirvieron para enviar a provincias vecinas.
En total, de acuerdo a los datos relevados por la Dirección de Investigación en Salud que depende del Siprosa y coordina María Peral de Bruno, 54 pacientes recibieron plasma como parte de su tratamiento. Los registros arrojan que 28 de ellos se practicaron en el hospital Centro de Salud y 18 en el Eva Perón. El resto de los pacientes, en instituciones privadas. Los expertos advierten que el consumo de plasma avanza a mayor velocidad que el de la donación.
Los expertos aclaran que se trata de un procedimiento experimental, aunque las evidencias positivas en pacientes que han mejorado su estado de salud, resultan prometedoras. Tan es así, que el Ministerio de Salud de la Nación realiza un ensayo clínico para evaluar los riesgos y beneficios de este tratamiento.
Tucumán es una de las pocas provincias que participa de ese trabajo. La doctora Felicitas Agote, presidenta del Banco de Plasma de Tucumán, explica que la extracción se realiza a través del sistema de aféresis que emplea un procesador celular, que permite extraer el plasma, es decir, la parte líquida de la sangre. “Cuando una persona se enferma y contrae el virus, una vez que se recupera, el organismo genera una defensa natural que son los llamados anticuerpos. Esos anticuerpos actúan sobre el organismo que todavía no ha podido generarlos por sí mismo y reduce los riesgos de que el paciente llegue a cuidados críticos e incluso a usar un respirador”, detalla Agote.
La especialista cuenta que si bien trabajan desde junio con la donación de plasma convaleciente, han estado sin recibir donantes durante un mes. “Por eso es importante que en esta etapa de la pandemia en Tucumán, quienes se hayan recuperado, tomen conciencia de lo importante que es recibir su colaboración”, dice. La donación es un acto voluntario.
El plasma convaleciente solo puede ser empleado en pacientes cuyo estado de salud es moderado. “Ni leve ni grave”, aclara Agote y agrega que los resultados se ven de manera inmediata. “La mayoría de los pacientes ha tenido una notable mejoría. Se ve el cambio a las 24 horas”, cuenta.
El procedimiento es sencillo y el paciente sale de los consultorios del Hospital Nestor Kirchner caminando y sin ninguna complicación. En total, la donación lleva apenas entre cuarenta minutos y una hora.
Datos útiles
Condiciones y procedimiento
- Ya donaron plasma 35 pacientes recuperados en Tucumán.
- 54 personas recibieron plasma hasta ayer en la provincia.
- Más del 80% de los pacientes que lo recibió se recuperó favorablemente.
- Sólo dos pacientes que recibieron plasma fallecieron.
- El procedimiento no duele y tarda aproximadamente una hora.
- Pueden ser donantes quienes tengan entre 18 y 65 años y pesen más de 50 kilos. Deben realizarse estudios previos para comprobar que están aptos.