La nueva reglamentación de la ley que permite el uso de cannabis medicinal fue celebrada por referentes de la medicina, científicos y organizaciones que vienen tratando el tema desde hace tiempo. Aunque todavía es un borrador lo que presentó el Ministerio de Salud, es una luz de esperanza para muchos pacientes que hasta ahora debían moverse en la sombra de la clandestinidad para conseguir el producto. El Gobierno permitirá que los usuarios terapéuticos puedan cultivar en su hogar la planta de cannabis, además de habilitar el expendio del aceite de cannabis en farmacias y proyectar cultivos y producción pública.
Pasaron más de tres años desde que se sancionó la ley que permite el uso medicinal de la marihuana en Argentina. En todo este tiempo sólo pudieron acceder legalmente al producto aquellos pacientes que sufren epilepsia refractaria. Sin embargo, en la práctica, los derivados de la planta se vienen utilizando en pacientes con otras patologías, como cáncer, reuma, fibromialgia y dolores crónicos. Hasta el momento, sólo se permite la importación, que es costosa y no siempre de fácil acceso.
Uno de los puntos más fuertes de este borrador (que necesita la firma del presidente, Alberto Fernández, y la publicación en el Boletín Oficial) es que incluye la autorización del cultivo personal y en red para los usuarios, investigadores y pacientes que se registren en el Programa de Cannabis (Reprocann).
Estos son los aspectos centrales que plantea la nueva reglamentación:
1- Se ampliarán las especialidades médicas para la prescripción del cannabis. “Esto es muy importante porque hasta el momento es una ley discriminatoria, que sólo le permite acceder a este tratamiento a quienes tienen epilepsia refractaria y deja de lado todas las otras patologías. Hay distintos grados de evidencia sobre los beneficios del cannabis medicinal en otras epilepsias, dolores crónicos, enfermedades degenerativas y depresión, entre otras”, explica el médico de la UNT Facundo Álvarez, especialista en endocannabinología y terapéutica cannábica.
2- Se permitirá el autocultivo y la producción pública, con controles de calidad. “Esto es lo más urgente y se necesita resolver para garantizar el acceso de los pacientes a sus medicamentos y para que los usuarios dejen de ser perseguidos, ya que el paciente que no puede acceder legalmente al producto tiene dos vías para conseguirlo: a través del autocultivo, que hoy es ilegal, o por medio del mercado no regulado, con todos los riesgos que significa buscar el medicamento por medio del narcotráfico”, señaló Alvarez, que es investigador independiente y Cofundador y director de Relaciones Internacionales de Cannamerica. Cabe aclarar que los límites en la cantidad de plantas permitidas en cada hogar o en las sedes de las organizaciones para los cultivos “en red” se conocerán recién cuando el Ministerio de Salud redacte las resoluciones particulares.
3- Se habla también de que habrá un expendio de aceite de cannabis en farmacias habilitadas por el Estado, y que también el mismo Estado pueda producir el medicamento.
4- Según la reglamentación, los pacientes que carecen de obra social tendrían acceso gratuito a los derivados de la planta de marihuana.
5- Otra cuestión clave: se promoverá la investigación en materia terapéutica para otras patologías, no sólo para la epilepsia como lo prevé la ley en estos momentos. Esto, según los expertos, es fundamental porque uno de los argumentos en contra del cannabis medicinal es que falta evidencia científica.
6- Control de calidad. “Es algo muy importante porque es un riesgo de salud pública. Debe controlarse el contenido de los productos que se venden. Además, se propuso que este programa nacional abarque a los profesionales de la salud de todo el país y se pueda incluir a la universidad, para que por medio de programas de extensión universitarios haya capacitaciones y la posibilidad de acceder al control de calidad de los productos de autocultivo”, explicó.
“Hasta el momento sólo se permite la importación del aceite de cannabis, que es costosa y no siempre de fácil acceso. Creo que la reglamentación es buena porque el mercado ilegal al que los pacientes fueron empujados va a desaparecer. Estamos hablando de salud pública. Necesitamos un producto seguro; hoy no se sabe qué se utiliza cuando se vende informalmente el aceite. Debemos contar con un producto seguro”, evaluó Álvarez.
Mamás: "señal de que nos escucharon”
Integrantes de la organización “Mamá Cultiva” en Tucumán festejaron los avances que muestra el borrador que establece una nueva reglamentación de la ley de cannabis medicinal. “Es una señal de que nos escucharon”, dicen. El autocultivo y el cultivo en clubes ayudará a que el aceite pueda llegar a todos los chicos que lo necesitan. “Además, es la mejor forma de saber que lo que les estamos dando es seguro y no tiene pesticidas”, explica Mónica Rodríguez, mamá de un niño con autismo. “Notamos grandes mejorías en los chicos con autismo y con epilepsia. Desde que les damos el aceite toman menos pastillas y dejaron de padecer crisis”, afirma.