Una vacuna experimental contra el coronavirus de AstraZeneca y la Universidad de Oxford resultó segura y produjo una respuesta inmune en la etapa preliminar de ensayos con voluntarios sanos, indicaron los datos del estudio, generando expectativas de que pueda ser empleada a fines de este año.
La vacuna, denominada AZD1222, ha sido descrita por el científico jefe de emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una candidata líder en la carrera global para detener la pandemia, que ha causado la muerte de más de 600.000 desde los primeros casos reportados en China en diciembre.
Más de 150 posibles vacunas se encuentran en diversas etapas de desarrollo. Farmacéuticas como la estadounidense Pfizer y la empresa la china Cansino Biologics también reportaron respuestas positivas en sus propias fórmulas.
El primer ministro británico, Boris Johnson, cuyo Gobieno ha ayudado a financiar el proyecto, elogió los resultados como "una noticia muy positiva", aunque los investigadores advirtieron que la vacuna aún está en etapa inicial de estudio.
"Aún hay mucho trabajo por hacer para confirmar si nuestra vacuna puede ayudar a controlar la pandemia de Covid-19", dijo la investigadora Sarah Gilbert. "Todavía no sabemos cuán fuerte es la respuesta inmune que necesitamos provocar para efectivamente proteger contra una infección de coronavirus", agregó.
Las acciones de AstraZeneca saltaron un 10% tras la divulgación de los datos, pero cedieron buena parte de las ganancias y cerraron con un avance intradía de 1,45%.
AstraZeneca ha firmado acuerdos con gobiernos en varias partes del mundo para suministrar la vacuna si resulta efectiva y obtiene los permisos regulatorios. La compañía dijo que no buscará generar ganancias a partir de su vacuna durante la pandemia.
La fórmula AZD1222 fue desarrollada por la Universidad de Oxford para AstraZeneca, que inició ensayos a gran escala y de etapas finales para probar su eficacia. La compañía ha firmado acuerdos para producir y suministrar más de 2.000 millones de dosis de una sola aplicación, y 300 millones de dosis han sido separadas para Estados Unidos.
Pascal Soriot, presidente ejecutivo de AstraZeneca, contó que la compañía estaba en vías de empezar a producir dosis para septiembre, y que la expectativa de que la vacuna esté disponible a fines de año depende de que puedan completarse las etapas finales de los ensayos, en vista de la disminución de la prevalencia del virus en Reino Unido.
La compañía ha iniciado etapas finales de ensayos clínicos en Brasil y Sudáfrica, donde la prevalencia de contagios es más alta. Comenzará pronto las pruebas en Estados Unidos. (Reuters)