“San Martín es mi vida entera. Desde que me levanto a las 6 de la mañana, hasta que me voy a dormir a las 12 de la noche, pienso y vivo para el club. Es una de las cosas más importantes que tengo”. Luis López Mendoza no encuentra otra manera para explicar su último motivo de orgullo.
En Mendoza esquina pasaje Grecia, casi en el límite entre barrio El Bosque y La Ciudadela, un inmenso mural de 20 por cuatro metros se lleva toda la atención de los transeúntes. El rojo y blanco emerge con total furia y le da vida a una esquina recontra “ciruja”. “La familia Nasul tiene un quiosco allí. Todos sus integrantes son ‘enfermos’ de San Martín y nos dieron los materiales para que nosotros hagamos el mural”, cuenta “Luizito”, el grafitero más famoso de Bolívar y Pellegrini.
El dibujo en el que resalta un escudo gigante que se ve desde avenida Ejército del Norte, cuenta con la presencia de tres nombres propios con peso específico en la historia “santa”: Mariano Campodónico, Francisco Guillén y ‘Tino’ Costa, personajes que aportaron a la historia del club. Sus figuras van de mayor a menor y eso tiene un significado claro para el autor. “Campodónico está bien grande porque me marcó mucho. Fue quien nos dio el primer ascenso que yo viví. Después sigue la de Guillén, que le atajó un penal clave a Atlético, en 1992. Si nos metían ese gol quedábamos afuera, pero él lo atajó, los eliminamos y luego ascendimos. Y por último ‘Tino’, que si bien nos dio el triunfo en el clásico más importante de la historia, está unos pasos más atrás que los otros dos momentos”, asegura.
“Luizito” no está solo en la movida. Pintar murales de San Martín es lo que lo moviliza y por eso decidió armar un grupo integrado por varios artistas (ver aparte) que tienen la misma pasión y el mismo objetivo. “Queremos que todo Tucumán quede pintado de rojo y blanco; que a donde vayás haya un mural de San Martín pintado por nosotros”, explica el ideólogo de “Pura cultura ciruja”, el espacio creado hace poco más de un mes y medio y que ya les dio vida a varias pinturas en diferentes puntos de la ciudad.
“Como no hay fútbol y los jugadores no juegan, entendimos que era el momento en el que deben jugar los hinchas. Armé este espacio de arte y comenzamos a pintar. El primer mural fue uno gigante, en Corrientes a 4.000, y partir de eso comenzaron a llamarnos de todos lados”, explica el representante de un grupo que más allá de demostrar su amor por el club y de darles vida a diferentes lugares a lo largo y a lo ancho de la provincia tiene como uno de sus objetivos, brindar contención social. “Más adelante nos gustaría armar ollas populares y ayudar a la gente de los barrios más marginales. Queremos enseñarles pintura y, a partir de ahí, tratar de sacarlos de las adicciones”.
“Pura cultura ciruja” no anda con vueltas. Donde ve la oportunidad, diseña un mural y le da vida rápidamente. Hasta aquí, desde su creación, lleva una obra por semana y la idea es seguir en ese ritmo. No piden nada a cambio, sólo que quien solicite de sus servicios colabore con los materiales. Así lo hicieron en Villa Alem, en barrio Los Pocitos, en el Oeste II, y de igual manera piensan hacerlo en Alderetes, Aguilares y en Yerba Buena, desde donde ya los contactaron. “Me llamó el cuñado de Matías Kranevitter, así que iremos a pintar un mural en la canchita donde él comenzó a jugar. Queremos replicar esa famosa foto jugando en las inferiores de San Martín y seguramente lo pintaremos jugando para River, que fue el club donde despegó”, afirma.
En La Ciudadela su mano es casi una marca registrada. Fue él quien gestó varios murales alrededor del estadio; el que pintó la galería de los ídolos en el ingreso a la platea central baja; el que hizo el escudo gigante sobre calle Rondeau; el que ideó el ya famoso y tradicional cartel que recibe a los hinchas que visitan La Ciudadela y que reza que en ese lugar no se suspenden clásicos; y el que pintó el famoso telón “La Ciudadela, cuna de la Independencia”, que exhibe la hinchada “santa”. “Vivo para San Martín”, repite hasta el hartazgo López Mendoza. “Hacer estos dibujos y que la gente me reconozca por eso es algo único. Somos un hermoso grupo de hinchas que amamos al club y que no pedimos nada. Esto también lo hace grande al ‘Santo’”, sentencia.
La pasión de los hinchas inunda de color las paredes tucumanas. Todo sea por San Martín y para que el escudo y la bandera brillen en cada rincón y lo más alto posible.
Pura cultura “ciruja”
“Luizito”, Daniel Risso, Nicolás Farías, Yohana Díaz, Lourdes Medina, Pablo Carbajal, Esteban Puntano, Alejandro Tula y Martín Correa son los integrantes del grupo de artistas que tiene como uno de sus objetivos prioritarios pintar cada rincón de nuestra provincia con los colores de San Martín.