Si le daban a elegir al equipo de la bebida energizante donde quería comenzar la temporada sin dudas hubiese respondido en Austria. Es que Red Bull Ring es la casa de la escudería. El año pasado, en ese mismo escenario, Max Verstappen ganó la carrera en una demostración extraordinaria de valentía y perseverancia.
Recordemos por un instante: había clasificado segundo, atrás de Charles Leclerc y su Ferrari y en la largada no reaccionó a tiempo y terminó sexto en la primera vuelta. Sin embargo, como un león herido, poco a poco fue pasando a todos sus rivales hasta que, a tres vueltas del final y en una polémica maniobra, superó a Leclerc y subió a lo más alto del podio. Ese tipo de bravuconadas llevaron a ponerle el apodo “Mad Max”. Sin dudas, Verstappen es uno de los pilotos que le devolvieron el fuego a la F-1. Intrépido, atrevido y desafiante. Por momentos parece que arriba del monoplaza no le teme a nada ni a nadie. Esto es positivo, pero también negativo. Sus ansias de ganar a toda costa lo han llevado a cometer muchos errores, como aquel choque en la última prueba libre del Gran Premio de Mónaco 2018, donde estrelló el auto por “empujar demasiado” tal cual dijo el director de su equipo Christian Horner. Algunos interrogantes que surgen a raíz de esto son: ¿Verstappen tiene la madurez suficiente para ser campeón del mundo? y ¿Red Bull puede darle un auto a la altura de la circunstancia? El RB15 (auto que usaron en 2019) demostró velocidad y rendimiento en algunas carreras pero fue solo eso, destellos durante algunos grandes premios.
Desde 2013, el último año que fueron campeones del mundo con Sebastian Vettel como piloto, no han podido montar un coche con la regularidad que se necesita para ganar la temporada.
El RB 16 (auto que usarán en 2020) sorprendió a todos en los testing de Barcelona con una novedosa y doble acanaladura en el extremo de la nariz, algo que siempre ha escondido algún secreto para los de Milton Keynes. Después de Mercedes fue el auto más veloz, incluso superando a Ferrari. A bordo de él, también estará Alex Albon. El piloto Tailandés que correrá por primera vez una temporada completa con Red Bull. El año pasado se sumó a la escudería tras el receso de verano, luego que Pierre Gasly perdiera su asiento por malos rendimientos.
Alex demostró en nueve carreras que el lugar le sienta bien. En Brasil, el penúltimo Gran Premio del año pasado, hizo un carrerón. Faltando dos vueltas iba segundo hasta que Hamilton intentó pasarlo y se tocaron. Esto lo dejó lejos de lo que habría sido su primer podio en F-1, sin embargo se mostró paciente, quizás con la tranquilidad que se le reclama a Verstappen.
La pregunta que se dispara es ¿Albon tendrá en la pista la agresividad de Verstappen? Da la sensación que las virtudes que tiene uno le faltan al otro pero a las claras es uno de los dúos más prometedores de la categoría.