Por Juan Martín de Chazal
24 Junio 2020
El teletrabajo -o trabajo remoto- irrumpió con fuerza en el escenario laboral por la pandemia y el consecuente aislamiento obligatorio. Más allá de la crisis sanitaria, no pocos especialistas sostienen que la modalidad virtual llegó para quedarse y que convivirá con el trabajo presencial. Ahora bien, cuando el reto es que la excepción se convierta en regla en un mundo convulsionado, surgen cuestiones que generan resquemores y que exigen respuestas. Por ellas, en el Congreso de la Nación avanza un debate que busca regular esta actividad y dar luz a las inquietudes de empleadores y empleados.
La variedad de intereses que existen en torno al home office quedó demostrada en la cantidad de propuestas -más de una docena- que ingresaron en Diputados durante los últimos tiempos. Los legisladores han intentado unificarlas en un solo texto que podría ser tratado en el recinto la próxima sesión, cuya fecha aún no se definió, si se emite un dictamen único hoy en la comisión.
En resumen, los aspectos del trabajo remoto que se intentan regular son: el carácter voluntario de la modalidad y la posibilidad de revertirla; el derecho a la desconexión fuera de la jornada laboral; la provisión de las útiles de trabajo; la cobertura de los servicios usados en el hogar; entre otros. En tanto, algunas de las objeciones de los empresarios que ya expusieron son el eventual aumento de los costos de ART y el posible impacto negativo sobre las PyMEs.
Una ley marco
Gabriel Muntaner, abogado especialista en Derecho Laboral, opinó en diálogo con LA GACETA que, para evitar mayores inconvenientes por la variedad de casos particulares, la iniciativa debería ser aprobada como una ley marco y “dejar la operatividad a los convenios colectivos de trabajo”. “Si se legisla con un debate amplio y para el futuro, de aquí a 90, 180 días, está bien. Ahora, que salga en medio de la pandemia, puede ser más difícil porque estamos una realidad distorsionada con este tema”, consideró.
Si bien el letrado expuso que es necesaria una reglamentación “porque la ley del contrato de trabajo vigente no es suficiente”, advirtió que hay puntos que, en caso de ser aprobados, podrían generar “derechos en pugna”.“El empleador tiene el derecho de organizar la empresa de la forma que más conveniente estime para la producción. Así, si el empleado puede decidir de repente si teletrabaja o no puede ocasionar un perjuicio si la compañía redujo sus espacios laborales físicos”, ejemplificó. Y apuntó: “distinto es cuando esas cuestiones se coordinan por convenio”.
Muntaner también observó que una ley es necesaria para “regular cómo se distribuyen las cargas” en torno a los gastos que implica trabajar en casa, así como en caso de que ocurran accidentes en el domicilio durante la jornada laboral. En esa misma línea, Héctor Viñuales, titular de la Cámara de Turismo y vicepresidente de la Federación Económica de Tucumán (FET) dijo que una de las “zonas grises” que se deben aclarar por ley es la cobertura de la ART. “Para ello, es necesario que se establezcan bien los horarios de trabajo en casa”, puntualizó al ser consultado por este diario.
El empresario se manifestó a favor de la regulación del home office y, de hecho, sostuvo que se trata de una oportunidad para reformar la legislación laboral en conjunto. “Estos cambios han hecho repensar a sindicatos, empresarios y políticos para cambiar las reglas y poder despegar”, afirmó. Así, juzgó que en caso de haber conflictos entre las partes, “el mercado pondrá las condiciones”. Alberto Guardia, titular de la FET, también opinó que “es importante discutir el tema junto a una reforma laboral e impositiva que revea los altos costos actuales”. “No creo que haya obligación general de teletrabajar; cada compañía evaluará sus oportunidades”, agregó.
No todos los rubros
Como Muntaner, los directivos de la central empresaria previeron que cada sector debería establecer por convenio las condiciones puntuales para el teletrabajo. Por su parte, Jorge Barber, de la Cámara de la Construcción, lo observó así: “es un formato que puede optimizar tiempos, pero no para todos. Aun en la administración, organizar la logística de las obras es difícil desde casa”. Gabriela Coronel, de Comercio, también evaluó que los negocios pequeños no poseen la dinámica para esa modalidad. “No da resultados”, calificó.
Críticas
Cuestionamientos de empresarios en el Congreso
El lunes, el sector patronal expuso su postura durante la última reunión informativa de la Comisión de Legislación del Trabajo ante las propuestas que buscan regular el teletrabajo. Las críticas -citó Infobae- incluyeron el hecho mismo de discutir una ley “porque esa modalidad ya existe y se reglamenta a través de convenios colectivos”. Además, los industriales y comerciantes que disertaron cuestionaron el pedido de reversión unilateral de modalidad de trabajo por parte del empleado y el impacto en las ART, la instrumentación del derecho de desconexión, entre otros puntos sobre costos.
Diputados
“La normativa actual de trabajo es incompleta”
La diputada tucumana Lidia Ascárate (Juntos por el Cambio) es una de las firmantes de uno de los proyectos que buscan regular el trabajo remoto. “Hoy no hay un instrumento jurídico específico; cobra especial relevancia que el Congreso apruebe una norma por la pandemia”, afirmó. “La normativa actual de trabajo resulta incompleta ante la nueva normalidad y el aislamiento”, agregó. La radical dijo que, siguiendo ese sentido sanitario, trabaja en dos propuestas legislativas que buscan evitar aglomeraciones tanto en los trabajos como en el transporte público.
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