Decenas de motociclistas se movilizaron en caravana desde la plaza Urquiza hasta la Casa de Gobierno para expresar su rechazo a la ley contra los "motochorros", que establece restricciones para la circulación en esos rodados, además de estrictos controles viales a cargo de las fuerzas de seguridad.
"No somos delincuentes", es la consigna que se repite en pancartas y banderas.
Los manifestantes buscan que el gobernador, Juan Manzur, disponga el veto o evite la promulgación de la ley sancionada por el Poder Legislativo, según la cual no pueden circular dos personas adultas en una sola moto (con excepciones, como relación de parentesco directo), entre otras medidas.
"Esa norma nos estigmatiza a todos, nos discrimina. Nos pone a todos en un plano de igualdad negativo: somos todos motochorros. Estamos de acuerdo con los controles, con que exijan toda la documentación, el casco, pero no nos parece que se implementen medidas ilógicas, que sólo perjudican a quienes usan este medio de transporte por no contar con un automóvil", expresó Pamela Galetto, abogada y participante de la protesta, en diálogo con LA GACETA.
Los manifestantes están indignados con distintos aspectos del texto sancionado por la Cámara provincial, como la colocación de GPS en los rodados y la obligatoriedad de llevar un permiso oficial para poder circular con un acompañante.