Escribió un post en Facebook, indignada. Luego, las autoridades de Odontología de la UNT emitieron un comunicado oficial repudiando su publicación. Más allá de la polémica, Camila Morfil sostiene su postura. “No estoy en contra de nadie, esto no es una guerra, pero en 2018 rendí y aprobé mi última materia. Somos unas 60 alumnas que estamos en una especie de limbo: no somos odontólogas porque no tenemos el título, y no somos estudiantes porque ya hemos terminado la carrera. Necesitamos que esto se resuelva”, planteó la joven, en diálogo con LA GACETA.
Morfil había expresado su enojo en las redes sociales. Su texto fue compartido decenas, y alumnos de otras carreras se sumaron a su bronca, a través de los comentarios, por la demora en la entrega de los títulos habilitantes.
Pero las palabras que había elegido en Facebook no cayeron nada bien entre las autoridades de Odontología, quienes expresaron su “repudio generalizado” ante frases que consideraron de “contenido agraviantes”. "Al mismo tiempo, manifestamos que a pesar de la situación de emergencia epidemiológica ocasionada por el covid-19, que llevó al cierre de la UNT acorde a las resoluciones emanadas de la Nación, en nuestra unidad académica se están realizando las tareas administrativas que las circunstancias legales lo permitan, con el apoyo de miembros de nuestra facultad", señala el comunicado, firmado por la decana de la carrera Liliana Zeman y publicado en el sitio oficial de la Universidad.
Si bien no mencionaron su nombre, Morfil comprendió que el mensaje estaba dirigido a ella. “Expresaron su repudio, pero no dieron ninguna solución. Entiendo que puede haber pacientes de riesgo de coronavirus entre los no docentes. Pero hay alternativas, como que se capacite a personas que no estén en riesgo o el teletrabajo. En Buenos Aires, que tienen miles de casos de coronavirus, las autoridades tomaron todas las precauciones del caso para entregarles los títulos a los egresados de 2019”, añadió.
Luego, detalló que esta documentación es esencial para quienes apuntan a trabajar en el ámbito de la salud. “Sin seguro de mala praxis no podés hacer nada. Al no tener título, ni siquiera podés especializarte. Son dos años que tenés que trabajar en otra cosa. Algunas compañeras en esta situación son secretarias de consultorios, y cobran $8.000 al mes. Eso no alcanza para vivir, no es justo”, explicó.
Señaló luego que junto a sus colegas está haciendo gestiones ante el Colegio de Odontólogos para que se habilite una matricula provisoria, con seguro incluido, a fin de que las personas en esta situación puedan comenzar su carrera profesional. “De todas maneras, necesitamos nuestro título. Es nuestro derecho, y no pedimos nada que no nos corresponde. No estoy en contra de las autoridades ni de nadie. Estoy a favor de que apuren estos trámites”, insistió Morfil.