EL SEPULCRO VACÍO. La Iglesia espera la Resurrección del Señor.
Día de silencio, ayuno y oración para los cristianos. La Iglesia permanece espiritualmente al lado del sepulcro vacío, meditando la Pasión y Muerte de Jesús. Es el día más triste del año, pero también el de mayor esperanza, porque después de la Vigilia Pascual que comenzará al atardecer de hoy, se celebrará la Resurrección del Señor, que significa el triunfo de Dios sobre la muerte; y el nacimiento espiritual de un hombre nuevo.
El arzobispo de Tucumán, Carlos Sánchez, presidirá la Vigilia Pascual esta noche, a las 20.30, desde la Catedral, sin presencia de fieles. La celebración será transmitida en dúplex por los canales 10 y 8. Aunque también se podrá ver en la página web del arzobispado local y en su página de Facebook.
Todas las parroquias transmitirán las celebraciones por medio de Facebook, que es la plataforma más utilizada por los fieles en esta Semana Santa con templos cerrados a causa de la pandemia de coronavirus.
- La parroquia de Guadalupe, del barrio Lomas de Tafí, transmitirá la celebración esta noche a las 20, desde su fan page “Nuestra Señora de Guadalupe Lomas de Tafí Tucumán”.
- La parroquia Sagrada Familia de Alderetes transmitirá por Facebook hoy a las 15, la novena por la Divina Misericordia, y a las 19, la misa del Sábado de Gloria. En tanto que mañana se rezará la novena a las 15 y se oficiará la misa las 9 y a las 19.
- Por la fan page de la parroquia Cristo Rey se emitirá la misa de Pascua, hoy y mañana a las 20.
Señor de la Salud
Ayer, el pueblo de Tucumán se consagró al Señor de la Salud y se encomendó a Él para que libre al país de la pandemia. En la celebración de anoche, transmitida por los canales 10 y 8, monseñor Sánchez realizó la consagración. Horas antes se viralizó por las redes una oración especial al Señor de la Salud que todos los fieles leyeron desde su casa. En ella se rogaba al Todopoderoso por las familias tucumanas, la patria, el personal sanitario, los enfermos, los que deben salir a trabajar, ancianos y tucumanos en general.
La primera vez que Tucumán se encomendó al Señor de la Salud fue en ocasión de la epidemia del cólera, entre 1886 y 1887. La imagen aún se conserva en la basílica de La Merced.
