Ante la pandemia del coronavirus que sacude a la salud y a la economía del país, las obras sociales y prepagas se comprometieron a no aumentar sus cuotas por seis meses, ni cortar el servicio por falta de pago y deudas.
Las empresas llegaron a un acuerdo con el Poder Ejecutivo Nacional (PEN), que en los últimos días ya había anunciado el congelamiento de tarifas de servicios, alquileres, cuotas de créditos y desalojos como medidas para paliar los daños causados por este contexto de pandemia y cuarentena.
Según lo que trascendió, las empresas serán beneficiadas con la reducción de costos para la importación de insumos médicos, reducción de Ingresos Brutos para sanatorios y hospitales.
"No se va a aumentar. Ni siquiera se discuten esas cosas en estos momentos", advirtió el director de una firma de medicina prepaga a Página 12 y agregó: "estamos trabajando con total celeridad en un conjunto de medidas pero no tienen que ver con aumentos. Y el servicio no se va a cortar. Eso descartalo".
Las empresas de medicina prepaga atienden a 6.200.000 afiliados, de los cuales solo 1.200.000 contrataron el servicio por su cuenta. El resto deriva sus aportes de la Seguridad Social a través de obras sociales.