21 Marzo 2020
EXHAUSTO. Un trabajdor de la salud regresa a su casa tras una larga jornada laboral. FOTO LA GACETA/DIEGO ARÁOZ
Al menos en la zona céntrica de la capital, el aislamiento obligatorio le cambió la cara a la noche del viernes. Las calles vacías y el silencio la convirtieron en una ciudad extraña.
Sin embargo, esa postal no se repitió en otros sectores ya que la Policía aprehendió a más de 200 personas por no respetar la cuarentena impuesta por el Gobierno nacional, cuyo objetivo es frenar la propagación del coronavirus.
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