Dos allanamientos realizados ayer por la Policía sirvieron para sumar evidencias en contra de una banda que habría cometido un violento asalto a unas religiosas hace casi un mes. Durante la medida secuestraron U$S 13.000 unos $ 4.200 y armas de fuego.
Según confiaron fuentes judiciales, las monjas que pertenecen a una congregación en barrio Sur, se encontraban durmiendo cuando fueron sorprendidos por un hombre que tenía el rostro tapado con un máscara y que portaba un arma de fuego. Luego de reducirlas, las trasladó hasta donde tenían guardada una importante suma de dinero. Si bien es cierto que no se informó oficialmente el monto de lo robado, sí trascendió que fueron dólares, euros y pesos nacionales.
Las religiosas denunciaron el hecho en la Seccional 2ª. Personal de esa dependencia policial, al mando del comisario Alfredo Díaz, investigó el hecho y descubrió algunos indicios.
El solitario asaltante ingresó a la vivienda -donde también funciona un jardín de infantes- con una llave que abrió la puerta y caminó como si conociera el lugar donde estaba cometiendo el ilícito. También descubrieron que del asalto habría participado más de una persona. En la puerta del lugar estaba estacionada una camioneta que también fue identificada.
Los policías, después de haber reunido varias pruebas, se presentaron al fiscal Ernesto Salas López, quien solicitó al juez Facundo Maggio que autorice los allanamientos. El magistrado aceptó el planteo y los uniformados se presentaron en una casa de Lomas de Tafí donde encontraron esa importante cantidad de dólares y las armas.
El propietario de la vivienda es un contratista que estaría vinculado a la empresa constructora que realizaba tareas en el establecimiento educativo donde se cometió el ilícito. Los ocupantes de la casa, habrían señalado que el dinero encontrado proviene de la venta de una propiedad. El fiscal Salas López, que pedirá que se compruebe el origen del dinero, no ordenó ninguna medida en contra del hombre.
El otro allanamiento se realizó en la capital tucumana. Los policías se presentaron en el domicilio de una empleada del colegio. Allí también secuestraron dinero en efectivo, de acuerdo a la información oficial.
Misterio
“La verdad es que estamos sorprendidos por lo que sucedió. En el barrio no se habló mucho del tema, pero generó sorpresa ahora que se descubrió el monto. Es increíbles, ni las religiosas se salvan”, indicó Marcos Fernández, empleado de comercio.
El hecho generó un revuelo en el vecindario. “Es una zona insegura, como gran parte de la capital. En el barrio se rumoreaba lo que le había pasado a las hermanas, pero nadie se atrevió a preguntar mucho. Evidentemente fue una entregada porque nadie podía saber que ellas tenían semejante suma de dinero en su poder”, comentó María Laura de Herrera.
El colegio no brindó ninguna información al respecto. Ayer, por la emergencia sanitaria, se encontraba cerrado. “La gente es muy mala y comenta sin saber. La congregación que dirige el colegio es muy importante a nivel mundial. Además, viven haciendo campañas para recolectar dinero”, destacó Fernanda Fuentes, madre de una pequeña que asiste al establecimiento educativo.








