Dolor. Esperanza. Solidaridad. Agradecimiento. Todos esos sentimientos dejó por escrito Sol, la mamá de Lucía, la niña de 11 que violada y embarazada por su abuelastro. “Ahora tengo que tratar que mi hija esté bien, que recupere su vida normal y pedir que el Estado se haga cargo de todo lo que la Justicia ordenó para que no le pase esto a otras niñas”. Con estas palabras, Sol, la habló sobre el fallo judicial que condenó al hombre (67 años) a 18 años de cárcel.
La mujer pidió que cierren la causa contra los doctores que realizaron la interrupción legal del embarazo de la niña y le solicitó al Estado que "se cumpla la sentencia y que no lo larguen hasta que la termine".
La justicia tucumana condenó al hombre por el delito de "abuso sexual con acceso carnal, agravado por el grave daño a la salud de la víctima y por convivencia en concurso real" y lo condenó a la pena de "18 años de prisión accesorias legales y costas procesales".
Sol, madre de Lucía (se resguarda su verdadera identidad para proteger a la niña) emitió una sentida carta donde realizó una serie de agradecimientos y pedidos. "Quiero contarles que estoy feliz, aunque hubiese querido que la condena al violador de mi hija sea de cadena perpetua. Pero creo que 18 años está bien. Lo que pido es que se cumpla la sentencia y que no lo larguen hasta que la termine”, escribió.
Lucía tenía 11 años cuando la pareja de su abuela abusó sexualmente de ella. Producto de esa violación, la niña quedó embarazada y durante casi un mes buscó que le permitiesen abortar. Sin embargo, por las dilaciones por parte del Estado se cumplieron 21 semanas de gestación y tuvo que ser sometida a una cesárea. Tras agradecer a sus abogados y "la parte de nuestra familia que nos acompañó", Sol se refirió a los médicos que realizaron la ILE. "Les agradezco infinitamente a los doctores José (Gijena) y Cecilia (Ousset) que han estado con nosotras desde el primer momento. Por eso le pido a la Justicia que cierren la causa contra ellos porque son inocentes. Ellos le salvaron la vida a mi hija".
Lucía terminó la escuela primaria –dijo la madre- y seguirá con sus estudios. “No tengo palabras para expresar todo lo que siento. A mi hija y a toda nuestra familia la marcaron de por vida con este dolor", escribió Sol. En la emotiva carta concluyó que tras la decisión de la Justicia buscarán "mirar hacia adelante y a reparar todo el daño que nos causó el violador y quienes trataron de impedir que mi hija se haga la ILE”, resaltó.