Fernando Burlando, abogado de la familia de Fernando Báez Sosa aseguró que cuenta con los elementos suficientes para llevar la causa a un juicio oral. “Homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas”, fue la caratula de la causa con la que la fiscal Verónica Zamboni había imputado como partícipe necesario a Alejo Milanesi, el joven que no fue reconocido por los testigos pero que podría haber estado en la escena del crimen.
“Todos los involucrados en este episodio registran algún tipo de eritema o excoriación en diferentes partes”, dijo Burlando incluyendo también como parte a Milanesi.
Si bien el abogado hizo hincapié específicamente en pequeñas heridas como “rasguños o hematomas” aclaró que esas lesiones resultan fundamentales ya que “pueden hablar de algún tipo de agresión, de haber estado en una lucha y eso hace que les sea muy fácil salir de la escena del crimen”, señaló en referencia a los imputados.
Debido a las últimas declaraciones de los testigos, la atención quedó puesta en otros dos imputados: Juan Pablo Guarino y Blas Cinalli, quienes habrían efectuado los últimos golpes antes de que Fernando terminara inconsciente en el piso.
Por su parte Máximo Thomsen y Enzo Comelli se encuentran aún más complicados puesto que la mayoría de los testigos aseguran haberlos visto en la escena del crimen. Comelli y Ciro Pertossi presentan excoriaciones y eritemas en distintas partes de sus manos, informó Burlando en una entrevista a TN.
Asimismo, a propósito de la sangre que se encontró en la ropa que vestían esa noche los acusados, se dispuso realizar un hisopado cuyos resultados estarán la semana que viene. “Se levantaron 48 rastros positivos compatibles con manchas hemáticas de las prendas así que ahí puede surgir algún tipo de elemento. Ahora estamos a la espera del cotejo de las muestras de ADN de los rugbiers”, añadió.
Además el abogado defensor aseguró que todavía hay más elementos por procesar y analizar: “hay más videos que se están analizando e identikits de rostros que se están sacando de las imágenes. También se hicieron hisopados de los restos de piel en las uñas de Fernando para que luego sean comparados con la de los detenidos”.
“Es un momento de mucha tristeza en el que lo único que podría alivianar semejante dolor es lograr que los diez imputados reciban la condena de prisión perpetua. Sería una forma de devolverle a Fernando algo de sus expectativas, proyectos e ilusiones, y también por lo menos darles a sus padres, que están desahuciados, entregados, sin ánimos de vivir, algún tipo de respuesta”, concluyó.