Se vienen baterías a base de hidrógeno

Los científicos chinos investigan en miles de frentes al mismo tiempo: mientras intentan dar combate al nuevo coronavirus, trabajan en la generación de hidrógeno a demanda y en tiempo real para alimentar pilas, una forma de energía limpia y silenciosa.

Por su disponibilidad, el hidrógeno es una alternativa factible a los combustibles fósiles; pero su baja densidad lo hace difícil de transportar con eficiencia.

Pero, según publican en el “Journal of Renewable and Sustainable Energy”, investigadores de la Academia de Ciencias de China y de la Universidad de Tsinghua parecen haber encontrado una solución: una aleación (combinación de metales) de galio, indio, estaño y bismuto, que -cuando se encuentra con una placa de aluminio sumergida en agua- produce hidrógeno. Este hidrógeno está conectado a un tipo de batería donde la energía química se convierte en energía eléctrica. Descubrieron que el bismuto en la aleación es clave: conduce a una reacción de generación de hidrógeno más estable y duradera.

“En comparación con métodos tradicionales, este sistema logra una mayor eficiencia de conversión -dijo Jing Liu, profesor de la Academia y de la Universidad de Tsinghua-. Podría ponerse en marcha rápidamente y funcionar en silencio. Y único que genera es agua, lo que lo hace amigable con el medio ambiente”. Sin embargo, es importante poder reciclar la aleación para reducir aún más los costos y el impacto ambiental.

“Hay algunos problemas en los métodos disponibles para separación la mezcla posterior a la reacción”, dijo Liu, pero destacó que vez que se resuelven estas dificultades, esta tecnología se puede utilizar para aplicaciones que van desde el transporte hasta dispositivos portátiles. “El mérito de este método es que podría realizar la producción de hidrógeno en tiempo real y bajo demanda”, dijo Liu. “Puede ofrecer la posibilidad de una era energética verde y sostenible”.