La alfombra roja ya estaba preparada, las arañas colgadas y el sistema de sonido andaba a la perfección. Mientras Los Ángeles se alistaba para los Grammys, una tragedia ocurría en una de las zonas más caras de la ciudad. La muerte de Kobe Bryant se sintió como un crudo golpe de realidad, en un día dedicado a la banalidad y a los lujos. La noticia movilizó a los famosos que estaban citados a participar de la entrega de premios más importante de la industria de la música, ya que el evento se llevaba a cabo en la segunda casa de la leyenda: el Staples Center. Pero a pesar de la tragedia, el show debió continuar.
Bryant falleció ayer por la tarde, al igual que otras ocho personas más, entre ellas, una de sus hijas. Volaban en su helicóptero privado sobre Calabasas -una de las zonas residenciales elegidas por los millonarios y las estrellas para vivir-, cuando la nave cayó.
Su muerte conmocionó a todo el país y estuvo presente durante todo el evento de música. Diferentes artistas lo recordaron en sus presentaciones y, el homenaje de apertura estuvo a cargo de la cantante Alicia Keys. Antes que comience la transmisión, Harvey Mason Jr, el director interino de la Academia de Grabación, pidió un momento de silencio: "considerando que estamos en su casa, me gustaría pedirles que se unan en un momento de silencio", dijo.
Al subir al escenario, Keys se refirió al basquetbolista: "aquí estamos juntos en la noche más grande de la música celebrando a los artistas, pero a pesar de estar con ustedes siento una gran tristeza porque más temprano Los Angeles, América y todo el mundo perdió a un héroe. Y mientras, estoy aquí de pie pero con el corazón roto, en el hogar que Kobe Bryant ayudó a construir".
"We're literally standing here heartbroken in the house that Kobe Bryant built." At the Staples Center, @aliciakeys opens the #GRAMMYs with a touching tribute. pic.twitter.com/wPY8VkReOb
— CBS (@CBS) January 27, 2020
Luego del mensaje, la artista invitó al trío Boyz II Men a acompañarla y juntos cantaron "It’s So Hard to Say Goodbye", para despedir al jugador. Entre lágrimas y aplausos de dolor, el público se unió al homenaje y las camisetas 8 y 24 que la leyenda vistió en Los Lakers, se iluminaron en lo alto del estadio.
"Esta noche es para Kobe", dijo la cantante Lizzo antes de empezar su presentación. Lik Nas X, colocó la camiseta de Bryant en una de las escenografías de su número. En tanto, los Jonas Brothers, lucieron un listón de luto morado, en recuerdo de Bryant.