Las diferencias políticas e ideológicas con Jair Bolsonaro están a la vista. Sin embargo, Alberto Fernández dijo que más allá de esas cuestiones es necesario construir una agenda común con Brasil. En su primer discurso oficial como presidente, Fernández remarcó que esa agenda debe ser ambiciosa, innovadora y creativa, y tiene que estar respaldada por la hermandad histórica de nuestros pueblos.
Fernández puso de relieve en su mensaje ante la Asamblea Legislativa la importancia de robustecer el Mercosur y la integración regional. "Debe ser una continuidad con el proceso iniciado en 1983 y potenciado desde 2003 por Néstor Kirchner", precisó.
"Con la República Federativa del Brasil, particularmente, tenemos para construir una agenda ambiciosa, innovadora y creativa -dijo-, en lo tecnológico, productivo y estratégico, que esté respaldada por la hermandad histórica de nuestros pueblos y que va más allá de cualquier diferencia personal de quienes gobiernan la coyuntura", aseguró.
El jefe de Estado pidió avanzar juntos en la construcción de un futuro de progreso compartido. "Nuestra Cancillería estará concentrada en conquistar nuevos mercados -resaltó-, motorizar exportaciones, generar una activa promoción productiva de inversiones extranjeras directas, que contribuyan a modificar procesos tecnológicos y a generar empleo", afirmó.
"Seguimos apostando por una América Latina unida, para insertarnos con éxito y con dignidad en el mundo. En 1974, el general Juan Domingo Perón señalaba que a niveles nacionales, nadie puede realizarse en un país que no se realiza. De la misma manera, a nivel continental, ningún país podrá realizarse en un continente que no se realice", aseveró.
Tras sostener que se trata de un mundo altamente complejo, con graves problemas y desequilibrios económicos, Fernández puso de relieve que "han crecido en varios países movimientos autoritarios, ha habido golpes de Estado y al mismo tiempo en varios países crecen reclamos ciudadanos contra el neoliberalismo y la inequidad social".
"En cualquier escenario, la Argentina levantará alto sus principios de paz, de defensa de la democracia, de plena vigencia de los derechos humanos. Defenderemos la libertad y autonomía de los pueblos a decidir sus propios destinos", remarcó.