Aumentos, paros, reclamos, crisis, quejas permanentes de los usuarios. A menos de un mes de terminar, 2019 quedará como un año atravesado por los conflictos del transporte público y, para colmo de males, cierra con la tercera suba de las tarifas, esta vez de un 30%.
Los empresarios dicen que el servicio es deficitario, que los subsidios no llegan como deben llegar o sencillamente no alcanza para cubrir los costos. Los usuarios se quejan constantemente por la mala calidad del servicio, que no se condice con los precios que hay que pagar. En el medio, los estados municipal y provincial ponen parches para que el sistema no colapse.
Esta tercera actualización del boleto dejará el precio del transporte interurbano y rural entre $ 32 y $ 54,50. Todavía queda definir a cuánto se irá el boleto urbano, que sería alrededor de $ 30. Es algo que todavía debe definir la Municipalidad capitalina.
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