02 Noviembre 2019
CONMOCIÓN. Facundo Ferreira, de 12 años, recibió un tiro en la zona de la nuca el 8 de marzo de 2018.
Los policías Mauro Díaz Cáceres y Nicolás González Montes de Oca irán a juicio oral imputados como coautores del homicidio del adolescente Facundo Ferreira. Así lo dispuso el juez de Instrucción II, Facundo Maggio, al hacer lugar al pedido de la fiscal Adriana Giannoni, a cargo de la investigación del crimen ocurrido en 2018.
Según el requerimiento fiscal, los agentes de la División Motoristas del Servicio 911 de la Policía, pasadas las 1 de ese 8 de marzo, cruzaron la platabanda y emprendieron la persecución, en contramano por avenida Benjamín Aráoz, de otro motovehículo. Este último rodado era conducido por un menor, de 15 años, quien llevaba de acompañante a Ferreira, de 12 años. En ese momento, Díaz Cáceres habría efectuado disparos con su escopeta (cargado con postas de goma) hacia los chicos. Los proyectiles impactaron en el tórax, en el brazo y el codo derecho, y en la rodilla del mismo lado de Ferreira.
Luego, Díaz Cáceres, “injustificadamente y con claras intenciones de provocar la muerte de los ocupantes de la moto” -de acuerdo con la acusación fiscal- realizó cinco tiros con su arma de fuego reglamentaria, una pistola Bersa 9 milímetros. Mientras que González Montes de Oca efectuó tres disparos también con su arma reglamentaria FM Hi-Power 9 milímetros.
En el escrito procesal se dejó en claro que los dos imputados habían actuado “aprovechado la situación de indefensión de las víctimas, sin dar la voz de alto policial ni pedir ayuda a otras unidades vía handy (HT)”. En particular, lo hicieron “sin recibir hasta ese momento agresión armada alguna en su contra”. Además, se reflejó que Montes de Oca se movilizaba “bajo los efectos de estupefacientes”.
Ante esa situación, el menor que conducía el motovehículo respondió con dos disparos. Llevaba consigo de manera “ilegítima” una pistola calibre 22 largo. Durante la instrucción, el chico fue sobreseído de la acusación de portación de arma al ser inimputable.
El desenlace
En medio de la persecución, Díaz Cáceres efectuó otros tres disparos contra los menores. En esos instantes, los chicos buscaron protección a lado de un contenedor ubicado en avenida Nicolás Avellaneda, pasando la calle Francia. Sin embargo, uno de los tiros ingresó en la zona de la nuca de Ferreira, quien luego fue trasladado hasta el hospital Padilla.
Las figuras
A ambos policías se los acusa de no haber actuado según los dispuesto por el protocolo oficial de la fuerza de seguridad, y de haber alterado las pruebas y la escena del hecho con la intención de obstaculizar la investigación. Inclusive, por “no haber tomado las previsiones para el traslado inmediato del menor hacia el hospital, quien se encontraba con vida”.
De acuerdo al requerimiento, se analizaron más de 150 pruebas, entre videos y elementos recolectados en el lugar y testimonios. Con todo ello, el juez hizo lugar al pedido fiscal y elevó el juicio oral en contra de los dos agentes policiales como coautores del homicidio, “agravado por alevosía en el abuso de sus funciones como miembros de la fuerza y por la utilización de un arma de fuego, en concurso ideal con el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
José Ardiles, subsecretario de Seguridad de la provincia, informó ayer que Díaz Cáceres y González Montes de Oca se encuentran “en situación pasiva”, es decir, “sin cumplir tareas” en la Policía. “Si son condenados en este proceso penal, serán exonerados”, afirmó el funcionario.
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