Ya en las primeras páginas del viejo y empolvado manual del fútbol es posible rescatar un postulado cuya vigencia se mantiene a pesar del tiempo y la modernidad de ciertos conceptos y esquemas: que los equipos se arman de atrás para adelante. Hacerlo de adelante para atrás es casi como querer construir una casa empezando por el techo, o como poner la carreta adelante del caballo. Y esto es al margen de si el equipo se perfila para un perfil más ofensivo; tener una defensa bien plantada le da a los de mitad de cancha para arriba la tranquilidad de poder lanzarse al ataque sin correr tanto riesgo en caso de contragolpe.
En ese sentido, Atlético todavía se encuentra en la búsqueda de esa solidez que hace tiempo le permitía sostener la ventaja una vez que se hacía con ella. Sin embargo, da la sensación de que el equipo va ganando sintonía de a poco, y que la confianza de estos tres triunfos consecutivos impacte en el rendimiento de aquí en más.
“Pasamos momentos malos, pero esto nos permitió acomodarnos. De todas maneras, sabemos que esto sigue y que no nos podemos relajar, porque a la primera de cambio nos podemos encontrar otra vez en la misma situación de antes”, advierte Bruno Bianchi, que no se deja llevar por la espuma de esos 10 puntos ganados de los últimos 12 en disputa. Para el central, Atlético no hizo más que recuperar algo del tiempo que había perdido.
“Es una pena haber empezado a esta altura, desperdiciamos mucho torneo, aunque bueno, era normal porque habían llegado muchos jugadores nuevos y lleva tiempo que el equipo se arme. Lo importante es que nos estamos acomodando y que por este camino podemos dejarlo a Atlético lo más arriba posible”, sacó en limpio el central.
Contra Patronato, la fortuna vino al rescate en el segundo tiempo, cuando el “Decano” ya había perdido la chispa del primero y sufría los ataques áereos que buscaban la altura de Ávalos. Sin embargo, la suerte es sólo una aliada de ocasión, y no conviene fiarse de ella, sobre todo cuando se aproxima la visita a un rival complicado como Colón en Santa Fe.
“Hay muy poco tiempo de descanso y nos toca jugar al mediodía en un lugar donde hace mucho calor, pero trataremos de hacer nuestro partido para seguir por esta buena senda”, aportó Marcelo Ortiz, integrante de una zaga en la que casi todos se han encontrado con la red de enfrente: él lo hizo una vez, Bianchi otra y Luciano Monzón en dos oportunidades. El único que falta para completar es Yonathan Cabral. “Seguramente ya va venir el de él también. De todos modos, mientras los defensores la saquemos, bien. Si después podemos convertir, mejor todavía”, aclaró Ortiz.
“Es así, los defensores estamos para eso. Si no nos hacen goles, más allá de que ganemos o empatemos, nos vamos contentos porque la misión está cumplida”, completó Bruno. Justamente esa será su misión contra el “Sabalero”: que el arco propio vuelva a quedar en cero, como el martes, y así poder seguir sumando, sea de tres, sea de uno.
Por lo pronto, Atlético y Colón chocarán en Reserva hoy a las 10. Las inferiores en Cuarta, Quinta y Sexta viajarán a Buenos Aires para enfrentar mañana a Lanús.