La Ley Sáenz Peña y LA GACETA vieron la luz el mismo año, 1912, con apenas algunos meses de diferencia. La norma que cambió la historia política argentina imponiendo el voto universal, secreto y obligatorio fue sancionada el 10 de febrero, mientras que la fundación de nuestro diario se produjo el 4 de agosto. En consecuencia, todas las elecciones presidenciales reflejadas en las páginas de LA GACETA (19 en total) se celebraron bajo ese paraguas democrático, que llegó a ser de pleno y efectivo cumplimiento con la incorporación del sufragio femenino en 1947.
Desde que nuestro país se ciñó a la vida constitucional (1853) hasta 1912, durante casi seis décadas, el poder se había mantenido en manos de las elites. La nueva norma les abrió la puerta a los partidos insertos en el campo popular y fue así que la primera elección celebrada con las reglas de la Ley Sáenz Peña, en 1916, consagró a Hipólito Yrigoyen, histórico líder de la Unión Cívica Radical. La irrupción del peronismo, en la década del 40, terminó de reconfigurar ese mapa, salpicado a lo largo del siglo XX por los recurrentes golpes de Estado que resquebrajaron la institucionalidad. Pero la democracia siempre supo abrirse camino y hoy viviremos un nuevo episodio de esta historia que LA GACETA acompaña desde el primer momento.
1916: La primera victoria radical
La Ley Sáenz Peña garantizó el juego democrático y la UCR abandonó su postura abstencionista. El triunfo de Hipólito Yrigoyen fue contundente, por ejemplo en Tucumán, donde el radicalismo obtuvo todos los electores.
1922 alternancia radical: Alvear
Fue una elección con escasa participación en todo el país. Marcelo T. de Alvear se impuso con holgura, ya que sólo perdió en Salta y en Corrientes. Los tucumanos le brindaron todo su apoyo.
1928: El segundo turno de Yrigoyen
Se votó en un clima caldeado. El radicalismo estaba dividido y llevó dos candidatos: Yrigoyen derrotó a Leopoldo Melo en todo el país, incluso en Tucumán. Dos años después lo derrocó el primer golpe de Estado de la historia nacional.
1931: Restauración conservadora
Agustín P. Justo ganó una elección deslegitimada por la poscripción de la UCR. El socialista Lisandro de la Torre fue su rival. Eran los tiempos del “fraude patriótico”.
1937 Roberto M. Ortiz y el fin de una época
Nuevamente dos candidatos radicales estuvieron frente a frente. Ortiz, respaldado por el oficialismo del presidente Justo y por los conservadores, venció a Marcelo T. de Alvear por más de 10 puntos de diferencia. Pero en Tucumán el ganador fue Alvear.
1946: Primera presidencia de Perón
Como secretario de Trabajo y Previsión del Gobierno de facto, Juan Domingo Perón había construido su liderazgo entre la clase trabajadora. Lo ratificó en las urnas pero por muy escaso margen: apenas 250.000 votos más que la fórmula Tamborini-Mosca, de la Unión Democrática.
1951: Una reelección contundente
La reforma de la Constitución le permitió a Perón presentarse a la reelección para el período 1952-1958. Su victoria sobre el candidato radical Ricardo Balbín fue arrolladora, con el 63,4% de los votos. La diferencia también se notó en Tucumán.
1958: La hora de Frondizi
El peronismo estaba proscripto, pero su líder bendijo la candidatura del desarrollista Arturo Frondizi, que venció a Balbín en todo el país.
1963: Arturo Illia, con el 31%
La proscripción del peronismo le permitió al candidato radical alcanzar la presidencia con un bajo porcentaje de votos. En Tucumán ganó su rival Arturo Alende, que llevaba a Celestino Gelsi como candidato a vicepresidente.
1973: La primavera camporista
La dictadura de Alejandro Lanusse levantó la proscripción al peronismo y su candidato, Héctor Cámpora, superó a Balbín con el 49,5% de los votos. Cámpora renunció a los 49 días.
1973 II: El adiós de Perón
Cámpora dejó libre el terreno para que se llamara otra vez a elecciones, ya que Perón quedó en condiciones de ser candidato. Le ganó a Balbín con un aplastante 61% de los votos.
1983: Ahora, Alfonsín
Ese era uno de los eslogans de campaña del candidato de la UCR, que en el regreso de la democracia obtuvo una inapelable victoria sobre Ítalo Luder. Pero en Tucumán Alfonsín perdió con el peronista por 50.000 votos.
1989: Todo cambia
La crisis económica fue el marco de la elección en la que el peronismo recuperó el poder. Carlos Menem superó al radical Eduardo Angeloz. En Tucumán lo hizo por 14 puntos.
1995: Casi un paseo
Volvió a reformarse la Constitución y Menem tuvo la chance de la reelección. La consiguió superando con holgura (49,9%) a José Octavio Bordón y Horacio Massaccesi.
1999: La Alianza
Fernando de la Rúa batió al oficialista Eduardo Duhalde por 10 puntos de diferencia. La sorpresa: hasta se impuso en Tucumán, bastión del peronismo.