Quejas por la política para el bioetanol

De campaña en Tucumán, el presidente Mauricio Macri anunció el lunes pasado la prórroga al 2023 de la Ley 26.093 (Ley de Biocombustibles). Según el Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (Oetec), ese anuncio es de corte netamente electoralista y llegó con efecto tardío. 

“La industria de biocombustibles que abastece al mercado interno -particularmente las vinculadas a la producción de bioetanol de caña de azúcar, PyME y algunas grandes no integradas productoras de biodiesel- está al borde de la quiebra”, indicó en un informe de la entidad. Subrayó, además, que la Cámara Sucroalcoholera Argentina (los ingenios que elaboran bioetanol en Tucumán) denunció penalmente a Gustavo Lopetegui en septiembre, por los constantes cambios en las reglas de juego. “La industria del bioetanol está reclamando soluciones desde hace años sin obtener ninguna respuesta. Igual para el biodiesel. El ninguneo y la falta de respeto son absolutos. En este sentido, no podemos dejar de recordar el trascendido de una reunión en la Casa Rosada entre Lopetegui y el titular de la Unión Industrial de Tucumán, Jorge Rocchia Ferro. 

Allí, el funcionario le dijo que si el negocio de la caña no le cerraba, que se dedique a plantar flores”, recordó el director del Observatorio, Federico Bernal. Expuso, además, que un caso similar sucedió entre el mismo funcionario y la Cámara de Empresas PyME Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb), “cuando en una de las últimas reuniones el secretario de Energía les espetó que los biocombustibles son un lujo que el país no puede darse”. Hace unos días, Rocchia Ferro, que preside la Unión Industrial de Tucumán, consideró que extender la vigencia sirve, pero es insuficiente. Recordó que esperaban que fuera prorrogada por cinco años y no por dos. “Estamos haciendo las inversiones (para producir el etanol) y necesitamos previsibilidad jurídica”, dijo en el programa Buen Día, el matutino de LA GACETA Play.

“No puede haber política de biocombustibles divorciada de la protección y fomento de las economías regionales, la salud del mercado interno, el consumo de los argentinos y las argentinas, la industrialización de las cadenas de valor de nuestra producción agropecuaria, la innovación e inversión en tecnología y una genuina política de generación de empleo”, afirmó Bernal. “Es tiempo de dar un salto cuanti y cualitativo en materia de legislación y regulación que permita posicionar y consolidar a los biocombustibles como herramienta clave del desarrollo social e industrial del país. Eso vendrá con el cambio de gobierno a partir de diciembre”, finalizó.

Qué dijo el Presidente

“Vamos a extender la ley del bioetanol, que vencía en el 2021, para que venza en 2023”, prometió el lunes pasado el presidente Mauricio Macri en su paso por Tucumán en el marco de su campaña proselitista con miras a su reelección en el cargo. El jefe de Estado apuntó que, durante su gestión, el corte de bioetanol tuvo su aumento en el corte de las naftas, pero no habló de si se volverá a subir ese porcentaje, que es lo que solicitaba el empresariado. Los productores de bioetanol aguardaban que el Presidente también anunciara un incremento del corte obligatorio del 12% al 15% y otro incremento del precio, del orden del 8%. Sin embargo, Macri sólo avanzó con la prórroga de la norma. En septiembre pasado, se fijó en $ 27,203 por litro, el precio mínimo de adquisición del bioetanol elaborado a partir de caña de azúcar para su mezcla obligatoria con nafta, a partir del 1 de octubre hasta la publicación de un nuevo precio que lo reemplace.