“Ya nos había pasado con la captura de Matías Galindo. Es una pequeña sensación de alivio. Se siente que se está cerca de la Justicia, pero es momentáneo. Después, uno cae y ve que Marcos (Sáez) no está. Esto nos hace revivir la situación, el dolor y la bronca”, expresó ayer Cali Piovano. La joven realizó esas declaraciones, tras conocer la detención de un adolescente, de 17 años, que está vinculado con el crimen de su ex pareja, ocurrido el 19 de diciembre pasado.
El menor de edad fue atrapado durante los allanamientos realizados en el barrio Juan XXIII (“La Bombilla”), durante la mañana. Fuentes judiciales confirmaron que el detenido, que permanecía prófugo desde el momento del hecho, se sumó a otros tres detenidos por el homicidio de Sáez. El motociclista, esa noche, murió de un tiro cuando era perseguido por cuatro desconocidos que intentaban robarle su vehículo. Circulaba por calle San Martín y al llegar Paso de Los Andes fue abordado y atacado por los motochorros.
En agosto, la fiscal Adriana Giannoni requirió la elevación a juicio oral por el homicidio agravado del joven, quien era padre de un bebé. En la formulación oficial, la funcionaria judicial ya imputó a tres personas: Galindo, Carlos Daniel Suárez y un menor de edad apodado “Chuchuá”. Ahora se sumaría el adolescente hallado ayer, conocido como “Pirulín”.
“Tenemos la esperanza de que la investigación judicial avance y que esta detención nos ayude en el juicio. Sin embargo, sentimos que todo sigue exactamente igual. Ahora, esperamos más información respecto de esta nueva detención. No sabemos mucho”, manifestó la familiar.
“Nadie quiere pensar que puedan salir impunes de esto. Pero es cierto de que se trata de un menor, y la esperanza de que pase algo ante esa condición, es poca. Por lo demás, Marcos no llega a casa y no lo hará”, finalizó.