28 Septiembre 2019
LONDRES.- A medida que el movimiento contra el cambio climático gana fuerza, niños y jóvenes de todo el mundo llaman a la acción para frenar el calentamiento global y proteger su futuro.
La cobertura de los medios se ha centrado en la activista sueca Greta Thunberg, de 16 años. Esta semana ella y otros jóvenes firmaron una demanda histórica en Naciones Unidas, donde denunciaron que el fracaso de los Estados para abordar el cambio climático viola los derechos de los niños.
Además de Greta, entre los líderes del movimiento ecologista hay otros jóvenes. Alexandria Villasenor, por caso, tiene 14 años y es una de las impulsoras de la huelga climática en Estados Unidos y de las protestas fuera de Naciones Unidas todos los viernes. Denuncia que la obligaron a organizar una revolución en lugar de hacer las cosas normales de los niños.
Por su parte, Ridhima Pandey, de 11, de India, ya es una veterana activista: a los nueve años presentó un caso legal contra el Gobierno por no tomar medidas sobre el cambio climático. También Wu Guanzhuo, de 17, acudió a la Justicia: obligó a cerrar una fábrica contaminante en China.
En América Latina, la brasileña Artemisa Xakriaba, de 19, es una líder juvenil indígena amazónica que hace campaña sobre los impactos del cambio climático en la Amazonía. Entretanto, una de las firmantes es argentina: Chiara Sacchi, de 17, insiste sobre todo en que se enseñe el cambio climático en las escuelas.
Y una de las activistas juveniles más valientes es la rusa Margarita Naumenko, de 15 años. Ella ha enfrentado a las autoridades de su país, que desconfían de las protestas y se han negado sistemáticamente a dar permiso para manifestaciones ambientales. También Guanzhuo, el joven chino, ha desafiado al Gobierno de su país, otro que limita las protestas ciudadanas. (Reuters)
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