“Cambiaron muchas cosas desde 2017”, evaluó Diego Schwartzman. Luego de derrotar en los octavos de final del Abierto de Estados Unidos a Alexander Zverev, número seis del mundo (3-6, 6-2, 6-4 y 6-3), a “Peque” le preguntaron qué tendrá de distinto mañana el partido que jugará por los cuartos de final, instancia a la que llegó por segunda vez en Nueva York. “La mayor experiencia que tengo y que aquella vez parecía una momia; estaba todo vendado”, recordó el 21° jugador de la clasificación mundial.
Es inevitable que el recuerdo, pese a que había sido su mejor actuación en torneos de Grand Slam, esté teñido de tristeza. Hace dos años, Schwartzman llegó a los cuartos de final con una contractura, algo que influyó sensiblemente para que el español Pablo Carreño Busta lo eliminara en sets corridos.
“Ahora llego mucho más entero. Sé lo que tengo que hacer después de los partidos, cómo tengo que alimentarme y recuperarme. Mucha cosas que cambiaron, sobre todo en mi mente, porque entiendo que puedo hacer este tipo de torneos y estoy preparado para esto”, explicó el ganador de tres títulos profesionales.
El rival de Schwartzman se definía al cierre de esta edición, pero fue él mismo el que daba por sentado que Rafael Nadal iba a vencer al croata Marin Cilic, aunque hubo una confusión primero. “Pensé que iba a ser Berretini”, reconoció durante el reportaje en la cadena de televisión que transmite el torneo. El error se produjo porque en las pantallas gigantes del estadio principal pasaban, en varias ocasiones, las imágenes del partido que el italiano Matteo Berretini le ganó al ruso Andrey Rublev. Cuando se enteró que la llave de donde saldría su rival era otra, a Schwartzman se le dibujó una sonrisa, pese a que enfrentará al segundo mejor jugador del planeta. “Es mi amigo y siempre me ayudó mucho en mi carrera”, se refirió a un potencial cruce ante Rafael Nadal.
Osaka eliminada
A la derrota por abandono de Novak Djokovic ante Stan Wawrinka, se sumó la de Naomi Osaka. La japonesa perdió ante la suiza Belinda Bencic por 7-5 y 6-4. Como Djokovic, Osaka era la defensora del título y líder del ranking femenino, posición que perderá al final del torneo. El duelo más atractivo de hoy lo protagonizarán Roger Federer y el búlgaro Grigor Dimitrov.