Juntos por el Cambio buscará reabrir la campaña electoral esta semana a través del contacto directo de los candidatos con la gente en la calle, pero pondrá especial énfasis en apuntalar a aquellos dirigentes mejor posicionados, que pelean por retener o ganar intendencias y a quienes aspiran a bancas en el Congreso.
Dirigentes del comando electoral del oficialismo aseguran que el partido “está de pie” y que darán la pelea para revertir el resultado de las Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias, en las que el macrismo quedó segundo, a más de 15 puntos de distancia del Frente de Todos. Extraoficialmente, admiten que dar vuelta el resultado “será complicado”.
En las reuniones de los últimos días (paralelas a las que celebró el Gobierno con el Gabinete y los aliados, en las que se prioriza la necesidad de estabilizar la economía), los dirigentes reafirmaron que el objetivo central en la campaña que se reinicia el próximo viernes debe ser “apuntalar” a los candidatos “con más chances de ganar” en sus distritos.
Para ello, los ministros y las principales figuras del espacio acompañarán a los dirigentes que mejor posicionados han quedado en los resultados de las PASO, tanto en la compulsa por las intendencias de Buenos Aires como en la carrera por las bancas en el Senado y en la Cámara de Diputados. Habrá salidas conjuntas en las caminatas y en los encuentros con los votantes.
“Nos dimos cuenta”
En el búnker de Cambiemos hacen cuentas y afirman que en las dos cámaras “se pueden ensanchar las bancadas” del espacio para continuar siendo una fuerza de peso en el Congreso “gane quien gane la Nación”, explicó el asesor de uno de los principales estrategas de campaña.
Laura Rodríguez Machado, senadora y jefa de campaña de Juntos por el Cambio en Córdoba, reiteró que lo que se viene es un trabajo más fuerte en el territorio, y confirmó que luego de la derrota de Mauricio Macri en las PASO se abandona el proselitismo en las redes sociales.
La secretaria nacional del PRO, Sofía Brambilla, opinó que “hay mucho que mejorar después de las PASO” y que en el espacio “entendieron” el reclamo de las urnas del 11 de agosto. “Nos dimos cuenta de que hay que escuchar más y de que hay una demanda clara de la gente a la que le cuesta llegar a fin de mes: nos está pidiendo que escuchemos, algo que no supimos hacer”, declaró.
Brambilla encabezó este viernes un encuentro de 300 mujeres dirigentes del macrismo de todo el país en Parque Norte, en el que se fijaron los primeros lineamientos de campaña y se buscó hacer una autocrítica sobre los motivos del fracaso en las urnas.
“Perdimos, no supimos escuchar”, volvió a decir la dirigente de Juntos por el Cambio y contó que de a poco comenzaron a “reacomodarse” a nivel partidario para volver a salir a la calle a encuentros y “timbreos”, con la mira puesta en achicar la diferencia con el kirchnerismo.
En Buenos Aires
Los armadores de la campaña en la provincia de Buenos Aires, acordaron que la gobernadora María Eugenia Vidal llevará adelante actividades “separadas” de las de Nación, con el objetivo de achicar la amplia diferencia que obtuvo Axel Kicillof, quien le sacó una diferencia de casi 17 puntos (49,3% contra 32,6%).
Para ello, la mandataria ya comenzó a recorrer los distritos donde peores resultados obtuvo, pero pidió hacerlo sin periodistas ni cámaras porque pretende “tener contacto más directo con sus votantes y sin interferencias”, contó uno de sus voceros.
En la ciudad de Buenos Aires, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, también empezó antes de tiempo con los encuentros con vecinos y al mismo tiempo la inauguración de obras, como parte de la misma estrategia de encarar de aquí a octubre campañas autónomas con respecto a las autoridades de la Nación. (Télam)