Macri pidió disculpas después del papelón del lunes, cuando se enojó insólitamente con los ciudadanos que eligieron otra opción y que le dijeron que no estaban de acuerdo con su gestión económica. Precisamente, los anuncios que realizó tienen que ver con cuestiones vinculadas a llevar alivio económico a los trabajadores.
Cabía esperar que reaccionara con un plan de medidas para responder al malestar expresado en las urnas. Y que también pidiera perdón, era de manual.
Ahora bien, la pregunta es si fueron adoptadas desde la resignación como medidas de transición, lo que implicaría reconocer que se le cerró la puerta a un segundo mandato; o bien si lo hizo pensando en los comicios de octubre, con lo cual todo se reduciría a intereses meramente electorales.
La distancia entre ambas intenciones es enorme; pero para el Gobierno, frente a la debacle electoral de las PASO, era casi una obligación alguna reacción.