La última película de Quentin Tarantino, que promete ser la penúltima de su carrera, sostuvo algunas definiciones sobre su cine, en tanto que aseguró que se vive el final de una era, la del cine, precisamente.
Leonardo DiCaprio, Brad Pitt y Margot Robbie son los protagonistas de “Érase una vez en Hollywood” que se estrenará en el país la próxima semana, a los que se agregan figuras como Al Pacino, Kurt Russell y Tim Roth.
Una y otra vez, el director confesó que durante mucho tiempo quiso hacer “una película sobre hacer películas, que es un subgénero”, y admitió que hay un gran empeño en visitar el pasado en distintos directores, como el mismo Alfonso Cuarón, con “Roma” o Pedro Almodóvar con “Pasión y gloria”.
El filme trata sobre la ciudad de Los Ángeles y los cambios en la industria de Hollywood; los hippies y la estancia de Sharon Tate asesinada por la secta de Charles Manson, hace 50 años.
“No podría definirlo, no sé qué es exactamente, pero sí pienso que siempre que hay un movimiento en el cine es porque hay algo en la atmósfera que atrae al artista. Cuando empezó el expresionismo en pintura no fue porque se juntaron unos cuantos y dijeron: ‘Venga, vamos a empezar a pintar cuadros raros’. Había en el aire el germen de una idea creativa que eclosionó. Con el cine violento independiente de inicios de los 90, pasó lo mismo”, explica el cineasta recordando que no recrea un Hollywood de color rosa, como a veces se ha querido interpretarlo.
“Un posible motivo es que hubo una reacción a la represión conservadora del cine de los 80. Simplemente, estábamos hartos y existe una onda melancólica y de nostalgia”, precisó. “Hay un elemento de nostalgia en esta película. Hollywood era diferente entonces, el cine mismo era distinto. Lo primero que viene a la mente cuando me hacen esta pregunta son los maravillosos sets que estaban allí”, rememoró.
Mirar de nuevo
Admirador del western spaghetti y de películas bélicas, opina: “Los italianos reinventaron el western clásico y nos enseñaron a mirarlo con ojos nuevos. Ésa es la clave: mirar de nuevo. Directores como Sergio Leone o Sergio Corbucci empezaron como críticos de cine, luego guionistas, luego segundas unidades. Estaban tan enamorados del cine como los directores de la Nouvelle Vague. Creo que llevo toda mi carrera intentando hacer precisamente eso una ópera de la violencia”.
Infaltable es la pregunta sobre cómo construyó “Pulp Fiction”, unos de sus trabajos más antiguos.
“En los diálogos, pongo a los personajes a hablar uno con el otro y yo simplemente lo transcribo como si fuera un taquígrafo. Creo, eso sí, que con el tiempo he mejorado, me he sofisticado. Mi método es muy parecido. Puede que antes escribiera más por la noche y ahora lo hago por el día, pero no creo que eso afecte a la creatividad. Lo que sí ha pasado es que, aunque siempre he tenido un ego muy sano, mi trabajo se ha hecho mucho más literario de lo que era en la época de ‘Perros de la calle’”.