“Las medidas que desarrolló la Justicia Federal no tienen precedentes en la provincia. Son, en definitiva, un aliento, una brisa de esperanza para lo que buscan la verdad”, sostuvo el abogado Gustavo Morales, representante legal de los detenidos que denunciaron haber sufrido todo tipo de castigos por haberse negado a vender la drogas que presuntamente les entregaban los guardiacárceles.
El profesional, en una entrevista con LA GACETA, agregó: “la medida que realizó el fiscal Pablo Camuña también es muy importante, porque por primera vez se le da importancia a la palabra de un preso. Todos tienen que entender que por encontrarse detrás de las rejas no debe perder la dignidad y todos los atributos que tiene un ciudadano”.
“También es una luz roja para todos los funcionarios del Gobierno que no entendieron lo que está pasando. Por este caso se debería haber separado de sus cargos a todos los funcionarios del área de Seguridad”, agregó Morales.
El abogado también se mostró conforme porque en la Justicia ordinaria sigue avanzando con la investigación de los casos de apremios ilegales y abuso sexual realizados por sus representados. “En síntesis, es saludable para la República que este tipo de casos no terminen escondiéndose”, concluyó.