Jugar con figuras del fútbol mundial como Andrea Pirlo, David Villa y Juan Román Riquelme. Consagrarse campeón del fútbol argentino con Boca. Vivir en Nueva York. Todo eso hizo Federico Bravo, el refuerzo que sumó Atlético ayer, durante su carrera futbolística.
El mediocampista de 25 años viene de mantener la categoría con Patronato de Entre Ríos, donde hizo uno de los goles que le permitió al "Patrón" sumar tres puntos para seguir en la máxima categoría. Fue contra Huracán, en un encuentro que se disputó en Paraná, donde el volante aprovechó su altura para marcar de cabeza.
Pero tiempo antes supo vestir los colores de uno de los dos grandes del fútbol argentino, donde se dio el gusto de compartir cancha con Román. "Con Riquelme me divierto. Es un jugador. Hace cosas que ninguno en el fútbol argentino supo hacer", comentaba el chico nacido en Villa María, Córdoba, en 2014 en durante una entrevista con TyC Sports.
Luego llegó el turno de emigrar a Estados Unidos, donde se desempeñó en el New York City, la franquicia del poderoso Manchester City en la Major League Soccer (MLS). Allí, le hicieron una curiosa encuesta en la que entre otras preguntas le consultaban si prefiere pelear con un pato del tamaño de un caballo o con 100 caballos con tamaños de patos. Insólito.
En ese equipo formó dupla con Pirlo en el mediocampo. Un sueño. "Creo que es una buena sociedad, porque Bravo tiene mucha dinámica, es agresivo sobre la pelota y, por supuesto, Andrea está siempre cómodo manejando el balón, tomando la decisión correcta", opinaba el DT que lo dirigía, Patrick Vieira, campeón del mundo con Francia en el 98.
Ahora la carrera de Bravo seguirá en Atlético, donde tratará de adaptarse para ser una de las piezas claves del plantel que Ricardo Zielinski está formando para disputar una temporada recargada que incluirá torneos nacionales e internacionales.