A casi seis años de que funcionarios nacionales prometieran la construcción de un centro de día para las adicciones en La Costanera, la obra finalmente fue realizada por la Provincia y ya está lista para inaugurarse. “El Centro Preventivo Local para las Adicciones, el Cepla de la Costanera, ya está listo. Se están ultimando detalles finalísimos y ya está puesto a disposición del gobernador Juan Manzur para inaugurarla. Gracias a Dios hemos llegado en tiempo y forma. El gran anhelo que tenía la gente del barrio se ve cristalizado”, explicó a LA GACETA Alfredo Quinteros, titular de la Dirección de Arquitectura y Urbanismo (DAU), mientras recorría la construcción.
El proyecto original había sido prometido en diciembre de 2013 a los vecinos por el ex titular de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) Juan Carlos Molina. El funcionario del kirchnerismo había recorrido el barrio acompañado por las Madres del Pañuelo Negro y había anticipado el anuncio del programa nacional “Recuperar Inclusión”, para la construcción de centros de atención en todo el país.
“Cuando asumí esta obra estaba abandonada porque la Nación no remitía los fondos de los certificados de obra, la construcción fue vandalizada y no quedó nada. Hasta que el gobernador tomó la decisión -en marzo del año pasado- de que la obra se realice con fondos provinciales. Ahí fue cuando adaptamos el proyecto original para que en vez de hacerse con paneles de construcción en seco se realice con materiales tradicionales”, agregó Quinteros.
Acompañado por su equipo de técnicos, el titular de la DAU explicó que en 1.300 metros cuadrados cubiertos el Cepla tiene consultorios, un departamento para un casero, un despacho para una guardia policial permanente, baños, duchas y un salón de usos múltiples. Este posee módulos que permiten dividirlo y utilizarlo como cuatro salas medianas o como un solo gran salón con capacidad para montar un microcine. También en planta baja hay una cocina y un espacio de comedor para 40 comensales.
En la planta alta hay oficinas, dependencias administrativas y se instaló un ascensor. Todos los ambientes tienen aire acondicionado y luces led. Afuera, junto al jardín, se techó el playón deportivo. Con dos plantas, el edificio se destaca por sobre las casas del sector del barrio más cercano al río Salí.
“Se emplearon materiales de alta calidad y se buscó que haya un bajo costo de mantenimiento, por ello la carpintería es de aluminio, el piso es granítico y se apuesta al ahorro energético con luces led y aires acondicionados con sistema ‘inverter’. Hablamos de un 60% de ahorro de energía sólo comparado con el uso de focos ‘bajo consumo’”, continuó Quinteros. Y agregó: “el objetivo es que sea una obra perdurable”.
Atención y contención
Noelia Teve, subdirectora de Centros de Día y coordinadora del Cepla, explicó que el Cepla ofrecerá una gama de actividades a los vecinos del barrio y que no solo enfocará en el acompañamiento de personas en situación de consumo. “La idea es poder trabajar en las áreas de asistencias, de prevención y de reinserción. Dentro del tratamiento, tendremos un equipo interdisciplinario que se encargará de la asistencia y el tratamiento de personas, así como también de asesorar consultas. A diferencia de los demás Cepla inaugurados, este tendrá áreas de deportes, con fútbol, boxeo, hockey, básquet y voley; y también manualidades, talleres de música, de folklore, de circo”, explicó la profesional. Añadió que este centro contará con “una oferta amplia de actividades de prevención, para generar espacios de inclusión, de socialización, no solamente destinado a chicos con problemáticas de consumo”. Funcionará de 8 a 18, de lunes a viernes, y explicó que no hay un número potencial de beneficiarios porque estará destinado a los vecinos del barrio.
¿Qué implica esta obra en una barriada tan estigmatizada?, se le consultó. “Es una manera de acercar el Estado al barrio, una forma de que la gente con menos recursos económicos para trasladarse a los hospitales grandes -que generalmente brindan estos servicios- puedan tener accesibilidad en el mismo barrio”, respondió.
El Cepla de La Costanera forma parte de un conjunto de centros de atención ambulatorios de adicciones puestos en funcionamiento hace un año por el Ministerio de Desarrollo Social, encabezado por Gabriel Yedlin. Se inauguraron centros en los barrios El Bosque, Villa Alem, Villa Luján, Villa Angelina y en el barrio 143 Viviendas, todos en locales alquilados. El de La Costanera es el único con un edificio propio.
Cuando se anunció el proyecto original del Cepla, la obra se había presupuestado en $ 12,5 millones. La construcción comenzó en 2015 y fue asignada a la constructora ByM, del entorno familiar del ex secretario de Obras Públicas, Oscar Mirkin. La obra se paralizó con un 42% de avance por el letargo en el pago de certificados de obra entre el final del kirchnerismo y el comienzo del macrismo. La estructura en pie fue saqueada en 2017: sólo dejaron el contrapiso.
En marzo de 2018, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, había informado en el Congreso que el proyecto de La Costanera no se concluiría. Un día después, Manzur anunció que la obra se concretaría con fondos propios. Por una compulsa de precios, el proyecto se asignó a la firma GAMA SA. El nuevo proyecto se presupuestó en $ 29 millones.