Venezuela habría pagado con el 91,5% de recargo los piñones que compró a la empresa tucumana Paramérica SA. Este y otros sobreprecios aparecen en más de 100 repuestos e implementos agrícolas analizados por la Sindicatura General de la Nación (Sigen). Ese organismo de control detectó también recargos y rebajas llamativos en las exportaciones de alimentos que la compañía de la familia Ruiz Juárez concretó por medio del Fideicomiso Pdvsa que habían constituido el chavismo y el kirchnerismo, y que el presidente Mauricio Macri dio de baja en 2016. Carlos Ruiz Juárez, presidente de la empresa, había asegurado que estos negocios observaron los precios y las modalidades del mercado.
Del informe de la Sigen se desprende que Paramérica SA colocó, ya en el período del régimen de Nicolás Maduro, productos manufacturados que no fabricaba y que no constan en el objeto social que declaró la empresa, según las bases de datos comerciales consultadas. En la página web oficial, la compañía exhibe el lema “Alimentos para el mundo” e informa que se dedica a la exportación de legumbres, en especial de poroto negro. “Nuestra filosofía de trabajo se basa en la mejora continua de los procesos, la actualización tecnológica, la responsabilidad, la sustentabilidad, la transparencia y el cumplimiento de la palabra empeñada”, dice la “tarjeta virtual” de Paramérica SA.
La auditoría no precisa las marcas de los bienes exportados, pero ayer Carlos Ruiz Juárez, y su socio y hermano, Marcelo Ruiz Juárez, confirmaron que actuaron como intermediarios. Y añadieron: “los precios de Paramérica SA eran inferiores a los de los fabricantes” (se informa por separado).
Dos anexos del estudio de la Sigen detallan los recargos calculados en función de los nomencladores del Mercosur, y del precio promedio de las exportaciones globales registradas en el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en la época de las facturas emitidas por Paramérica SA. La mitad de los recargos en las facturas de esa firma rondan o superan el 70%. Además del caso de los piñones, la Sigen también halló sobreprecios del 91,5% en productos como discos, semiejes, arandelas, cajas, aceleradores, pedales y cables. Los comprobantes de esta mercadería datan del 19 de diciembre de 2014.
Con el mismo procedimiento de comparación entre los precios de las exportaciones a Venezuela cobradas por medio del Fideicomiso Pdvsa y las del resto del mundo, la Sigen precisó sobreprecios en facturas que emitieron Eco SA, Laboratorio Elea SA, Invap Sociedad del Estado, Ascensores Servas SA, y Medix Industrial y Comercial SA. Paramérica habría aplicado los recargos más significativos, salvo por una factura de Ascensores Servas SA, donde el valor por encima al precio del mercado llega al 97%.
Levy aventó las dudas
Los auditores Ariel Maximiliano Bozzano y Alejandro Fabián Díaz elevaron su informe a la Sigen el 25 de abril pasado. Este análisis había sido solicitado por Marcelo Aguinsky, juez federal en lo Penal Económico Nº6 de la Ciudad de Buenos Aires, que tramita una causa contra Juan José Levy, cabeza de otro grupo de empresas que logró beneficios extraordinarios a partir de este acuerdo entre los gobiernos de la Argentina y de Venezuela. Aguinsky imputó a aquel empresario la supuesta comisión de cohecho y de soborno transnacional, entre otros delitos.
En el plano de las agroexportaciones de Paramérica SA, el informe de la Sigen detectó que esa firma había vendido a Venezuela maíz amarillo por U$S 27 millones cuando el producto valía U$S 14 millones. Esta operación generó una diferencia de U$S 13 millones. La Sigen halló un sobreprecio todavía mayor: por otro envío de maíz, Paramérica SA recibió U$S 19,1 millones. Si hubiese ido al mercado, le habrían dado U$S 116.000. En este caso el recargo ascendería a U$S 19 millones. Por el contrario, la firma tucumana habría perdido dinero al vender a Venezuela soja que valía U$S 200 millones por U$S 106,8 millones. Esta operación habría generado un quebranto de U$S 93,2 millones. Respecto de los porotos, la Sigen apuntó que la empresa de los Ruiz Juárez facturó U$S 26 millones cuando el precio de referencia era U$S 18 millones.
De la auditoría sobre los negocios de 15 empresas argentinas que participaron en el Fideicomiso Pdvsa se desprende que Paramérica SA fue una de las que más réditos obtuvo del acuerdo comercial entre los ex presidentes Hugo Chávez y Maduro, y Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner. La compañía tucumana facturó $ 3.000 millones (o U$S 179 millones) entre 2012 y 2016 (período alcanzado por la auditoría). Sólo el gigante de los lácteos Sancor superó esa cifra, con ventas por $ 3.831 millones.