La demanda general de combustibles registró en abril un incremento del 1,1%, una cifra que refleja el importante incremento del gasoil para la campaña agropecuaria y la recuperación de la nafta súper, pero compensa la continuidad de la caída de los productos premium que se refleja desde el último cuatrimestre de 2018.
De acuerdo con las cifras oficiales de la Secretaría de Energía, en abril el consumo de gasoil común o G2 creció 13% interanual, mientras que la variedad premium del diesel o G3 cayó 7,08% en el mismo período. Una situación similar se registró en las naftas, ya que la variedad súper en abril creció en su demanda un 7,25%, pero la variedad premium se desplomó 24,8%, siempre en la comparación con igual mes de 2018.
De esta manera, la evolución del primer cuatrimestre del año refleja una retracción del total general del 1,35%, cifras que se alcanza por la demanda en alza del gasoil G2 (6,2%) y la nafta súper (5,72%), y la caída del diesel premium (6,78%) y la nafta premium (24,35%). Desde la Confederación de Entidades de Comercialización de Hidrocarburos y Afines (Cecha) se explicó que el peso de la demanda del gasoil común, por recuperación del agro frente a la campaña 2018, fue el factor que permitió que abril cerrara en positivo.
Pero ese desempeño positivo no permite visualizar la contracción de las naftas -en ambos productos- que se viene dando desde septiembre y que en abril reflejó una caída del 2,96%, mientras que el balance de las dos variedades de gasoil para el mismo mes fue positiva del 5,91%. En cuanto a las ventas por producto, en el cuarto mes del año la nafta súper fue el producto más vendido (40% del total), seguida por el gasoil G2 (33%), el gasoil G3 (15%) y la nafta premium (12%).
En cuanto a la participación de las empresas en el mercado de comercialización de combustibles al público, reflejó en abril que YPF es el líder del mercado con el 53,7% del market share, Raizen el 20,62%, Axion el 13,3%, Puma 7,7% y Dapsa 2,63%, de acuerdo con el análisis de Cecha. (Télam)