15 Mayo 2019
Natalia Orozco es diseñadora, fundadora de Alkimia Textil Ancestral que se dedica al diseño sustentable al revalorizar prendas blancas, tiñéndolas o estampándolas para darle una nueva posibilidad de uso. El proceso incluye también el empleo de fibras que son 100 por ciento de origen natural, y el reemplazo del tinte de petróleo con tintas naturales.
La industria de la moda es altamente contaminante. "El 20% de las aguas están contaminadas con tintes que provienen del petróleo. Gracias a las acciones colectivas y a documentales que visibilizan esta situación muchas personas van tomando conciencia de ello y se van volcando cada vez más al diseño sustentable", contó Orozco, y detalló que en el caso particular de Alkimia han logrado trabajar con emprendedores y cooperativas de todo el país, replicando esta experiencia en cada vez más lugares.
Y si se piensa en las cosas que podemos hacer desde nuestra propia casa, una de las consultas más frecuentes es qué hacer con el aceite de cocina vegetal una vez usado y si es posible reciclarlo, eso fue lo que mostraron desde BYOS, quienes se dedican a reconvertirlo para transformarlo en biocombustible. El ingeniero Rubén Koss contó que son cada vez más las personas que buscan información sobre el proyecto, principalmente grandes consumidores. “Nosotros los purificamos y los entregamos para biodiesel, de esa manera solucionamos por un lado la contaminación y también ayudamos a reducir el costo del combustible”, explicó.
El reciclado es una excelente manera de mitigar el cambio climático, con prácticas sencillas que podemos incorporarlas fácilmente en nuestros hogares, como la clasificación de residuos, eso fue lo que mostraron emprendedores ambientales. María Agostina Torti presentó su proyecto Glass World Reciclado, y mostró cómo se puede reducir, reutilizar y reciclar botellas de vidrio, convirtiéndolas en aros, portavelas, vasos, portalámparas y otras cosas más que pueden usarse nuevamente en casa. “Son cada vez más las personas que se contactan con nosotros a través de las redes sociales, preguntándonos cómo cortar las botellas y dónde comprar los productos, porque ese también es un objetivo en el que tenemos que trabajar para ser consumidores responsables”, enfatizó.
Diego participó de las disertaciones junto a su pequeño hijo, e hizo hincapié en ello justamente, en aprender prácticas ambientales saludables pensando en un futuro sustentable para las próximas generaciones. “Es la primera vez que participó, me llevo mucha información, sobre todo en lo que es la bioenergía, en todo lo que nos falta comparándonos con otras ciudades del mundo, pero sabiendo también que podemos mejorar”, puntualizó.
Mónica es docente y resaltó en este sentido todos los aportes que podrán trasladar al aula. “Hay muchas cosas que no sabemos del cambio climático, y sobre todo cómo contribuyen los animales a nuestro medio ambiente, son temas que se les debemos enseñar a los niños, por eso estoy acá también con mi hija para que pueda aprender”, manifestó.
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