Tres de las panelistas de "Los Ángeles de la Mañana" (El Trece) rompieron en llanto mientras la periodista María Julia Oliván relataba la historia de su hijo Antonio. El niño de tres años tiene un trastorno en el lenguaje compatible con la condición del espectro de autista y ese diagnóstico la llevó a abandonar la televisión y dedicarse de lleno a estar con él.
Oliván formaba parte de "Intratables" (América) cuando se le detectó el trastorno. Según contó, el pediatra se alarmó porque "no hacía contacto visual, había dejado de señalar y no respondía a su nombre".
Al recordar cómo empezó todo, la periodista relató: "me acostaba en la cama para dormirlo, yo lloraba con él enfrente porque no me miraba. Le agarraba la carita y le decía 'mirame hijo' y él no me miraba, no había manera".
Mientras Oliván hablaba desde el móvil, en el estudio las panelistas Yanina Latorre, Iliana Calabró y Lourdes Sánchez no pudieron contener sus lágrimas.
Oliván agregó que el médico le recomendó iniciar un tratamiento de estimulación temprana y que eso la enfrentó al desafío de conseguir un certificado de discapacidad para que su prepaga se haga cargo del costo de la terapia. A partir de entonces, el niño mostró avances importantes.