Alfaro, capital afuera

Alfaro sonríe. Impuso su visión sobre la necesidad de llevar acoples en Vamos Tucumán. La mirada “peronista” sobre la efectividad territorial del uso de las colectoras pudo más que la posibilidad de que se desatara un conflicto interno que debilitase a la coalición si se rechazaba la solicitud efectuada por el PJS. El poco tiempo para los comicios, 45 días, obligó a tomar la salida menos drástica, aunque hayan quedado espíritus dolidos después de que algunos radicales defendieran la necesidad de listas únicas en el interior. Sentimientos que deben mantenerse ocultos, en el subsuelo de las ambiciones políticas personales, porque no todos aplauden. Sí cabe decir que aceptar las reglas electorales del peronismo implica confrontar con las mismas armas y no tan en desventaja en cuanto al valor de las adhesiones que pueden acercarse ahora por más que los candidatos -a legisladores, concejales, intendentes y a comisionados- que apoyen la fórmula gubernamental no resulten finalmente electos. Es que todo voto suma para pelear por el poder, fin último de la disputa por la gobernación. Además, para tener en cuenta: no sólo la visión del intendente salió airosa, sino que, con su movida, Alfaro puede extender su influencia más allá de la capital. Un ensayo con la mira puesta en 2023.