“En todo el país se está viviendo un proceso de profesionalización de la gestión cultural, con especializaciones, diplomaturas, licenciaturas y maestrías en distintas universidades públicas y privadas. Esa labor ha entrado en la agenda de las políticas culturales y el Estado ha comenzado a hacerse cargo de esta demanda”, señala Juan Grande, a horas de que mañana comience el dictado de la cuarta edición de la Diplomatura en esa área en la Universidad San Pablo-Tucumán (USP-T).
El director académico de la especialización que comenzó en 2017 destaca que “ya han egresado alrededor de 130 alumnos que provienen de las más variadas áreas y profesiones”. “Cuando surgió esta iniciativa, lo primero fue generar una oportunidad de formación para quienes ya estaban realizando gestión cultural en la provincia, y así sumar conocimientos teóricos a la práctica. Saber sobre economía de la cultura, una introducción a la administración económica para realizar certeros presupuestos o tener herramientas para entender el contexto político y económico actual y realizar diagnósticos reales para intervenir con eficacia sin trabajar a ciegas”, detalla.
La inscripción aún está abierta y se puede consultar requisitos escribiendo al correo electrónico [email protected], más allá de la clase inaugural de mañana a las 17 en la sede centro de la USP-T, 24 de Septiembre 476. Entre los docentes figuran Natacha Garbushian, Luis María Rojas, Andrés Bellomío y Carolina Cazón Zelarayán.
Grande destaca que este año se modificó la currícula con más horas de cursado y nuevos contenidos, qeu abordan los derechos humanos y los derechos culturales; la antropología, la política y la sociología, y la elaboración de proyectos, que culmina con la presentación por cada uno de los alumnos del diseño de una propuesta cultural propia.
“Un gestor cultural es aquella persona que tiene la posibilidad y la oportunidad de ser un nexo entre las producciones culturales y artísticas en una determinada comunidad y en un determinado momento histórico sociopolítico, en los que asume una responsabilidad ciudadana. Es imposible pensar nuestro rol sin tener en cuenta cual es la definición que tenemos de cultura, para entender que es lo que estamos gestionando: yo la entiendo como lo que configura las relaciones sociales en una comunidad y, por lo tanto, produce y reproduce seres humanos”, afirma.
A partir de esa definición, considera que “quienes pretendemos ser gestores culturales debemos asumir la responsabilidad que merece esta disciplina y sobre todo las consecuencias que devienen de nuestro trabajo, para lo cual es necesario estudiar y construir redes que nos permitan aportar y transformar la comunidad en la que incidimos”.