Los tres hombres que fueron detenidos cuando intentaban trasladar cocaína líquida en un vuelo a Lima (Perú) se encuentran en los tribunales federales para prestar declaración. Los arrestados son trabajadores de una empresa tucumana que tiene fincas en ese país.
La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) en un control de rutina, descubrió objetos sospechosos en tres valijas. Después de abrirlas, descubrieron tres envases con champú que, al ser analizadas con reactivos, dieron indicios de que se trataba de cocaína.
Por esta razón fueron detenidos Mario Longo y los peruanos Richard Bernabé Cabrera y Miguel Castillejo Robles, quienes dijeron estar vinculados a FGF Trapani. Una cuarta persona, que sería directivo de la firma, al no habérseles encontrado sustancia alguna en su poder, pudo continuar con su viaje.
Fuentes judiciales le confirmaron a LA GACETA que la sustancia secuestrada debe ser sometida a una serie de pericias para determinar si realmente se trata de cocaína y después determinar el peso exacto.
También, siempre los mismos voceros, tratan de establecer los motivos por los que los acusados habrían decidido trasladar cocaína desde esta provincia a la capital peruana. No sólo la ruta es poco común, sino que ese país es el segundo productor de esa droga a nivel mundial, detrás de Colombia y por delante de Bolivia, según los informes de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la agencia norteamericana DEA.