Por Leo Noli
08 Abril 2019
Si entre los hinchas de Atlético puede percibirse cierta inquietud por no saber si Ricardo Zielinski continuará la próxima temporada, entre la directiva se respira un aire de serenidad. La CD siente todo lo contrario a los simpatizantes: no tiene apuro en conocer la respuesta del técnico, porque conoce a la perfección como suele manejarse él en estos casos.
Ya lo dijo el propio entrenador: “pienso en el próximo partido, no en lo mío. Ya habrá tiempo para hablar de eso”, el concepto es concreto, paso a paso.
“Sabemos cómo es, entonces hay que mantener la calma. No es cuestión de desesperar por desesperar”, sostiene Miguel Abbondándolo, amigo personal del “Ruso” y pieza clave en las negociaciones entre el DT y la CD.
“Nos vemos seguido, pero de lo que menos hablamos es de su continuidad. Lo que a él le importa es el hoy, el funcionamiento del equipo y que siga siendo competitivo como lo fue desde que él tomó el cargo”, le comenta Abbondándolo a LA GACETA rato después de consumarse en Buenos Aires una derrota ante Huracán completamente descartable que no trajo ni traerá consecuencias de nada. No fue el cierre ideal del equipo en la Superliga, pero el “todo”, el resto de lo que produjo en la competencia, sí: el 5° puesto, con un boleto asegurado a la Copa Sudamericana 2020 así lo reflejan.
Hasta entrada la media tarde del miércoles no habrá actividad en Ojo de Agua. Recién ese día, a las 18, volverá el plantel. Mientras tanto, jugadores, colaboradores y cuerpo técnico disponen de un pequeño período de libertad, sin fútbol en el medio. El mini descanso le servirá al DT para estar con su familia, para recargar pilas. De hecho, lo que más podría pesarle en su decisión final es justamente su familia. De sus últimos 10 años de carrera, nueve los pasó fuera de Lanús, lejos de su esposa e hijos. El fútbol es así, a veces injusto.
Una señal positiva para aquellos hinchas inquietos podría ser esta frase esperanzadora de Abbondándolo: “te repito, no hablamos nada de su continuidad, sí de fútbol y otros temas puntuales de la actualidad del equipo. Lo bueno de todo esto es que cada cosa que menciona la hace siendo él parte de la historia de Atlético. Por eso estamos tranquilos, confiamos que Ricardo va a seguir con nosotros”. El contrato de Zielinski vence el próximo 30 de junio, en días de zona de definición de la Copa América, en Brasil. Atlético jugará su propia copa en el Monumental, a la espera de la renovación del entrenador.
Entre los pros que apuntalan el posible “sí” del “Ruso” están, precisamente, los logros deportivos. Atlético cumplió ampliamente sus metas: escaparle al descenso, pelear por un cupo en un torneo internacional y consolidarse en la divisional. A partir de haberse salvado del descenso, los otros méritos llegaron casi por decantación. El quinto lugar en la Superliga habla de que el “Decano”, con un presupuesto notablemente inferior, puede pelearle a los “grandes”.
Atlético no solo se salvó de caer a la B Nacional (arrancó la temporada a 3 puntos de la zona roja) sino que construyó una campaña tan sólida en números que la próxima temporada, la 2019/20, iniciará en el puesto 10 del promedio. A Lanús, por ejemplo, que arrancará en el puesto 18, a cuatro de los que están luchando por salir del abismo, le sacó una ventaja de 15 puntos. Alucinante.
Zielinski habló de consolidar a la institución en la divisional. Los cimientos están. Sería un gran desafío para él darle el siguiente empujón al equipo. Justamente, en Atlético el “Ruso” pudo darse un gusto: dirigir la Copa Libertadores y lo hizo cerrando 2018 entre los ocho mejores del continente. De película.
Para 2020 está asegurado el boleto hacia la Sudamericana, no está mal, pero lo que se piensa puertas adentro de la concentración es en la Libertadores. La Copa de la Superliga entrega un boleto, lo mismo la Copa Argentina. Y estando Zielinski al frente del barco, todo el posible.
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