La Cámara de Familia y Sucesiones de esta ciudad consideró que la Justicia tucumana debe sustanciar el juicio de divorcio del matrimonio de los abogados Carlos Marti Coll y Tulia Snopek, que es pareja del gobernador de Jujuy, Gerardo Morales (Cambiemos). Los camaristas Hugo Rojas y Ester Valderrábano de Casas afirmaron el 18 de marzo que, en consecuencia, es nulo el divorcio dictado por el Poder Judicial jujeño.
Los mismos magistrados antes había detenido en forma cautelar la anotación de la disolución del vínculo en el Registro Civil tucumano, por lo que Marti Coll y Tulia Snopek seguirán casados en los papeles hasta que sea resuelto el conflicto de competencia, que eventualmente ha de llegar a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. La letrada de la primera dama, Gabriela Saade, manifestó que no había nada que discutir puesto que el máximo tribunal argentino ya había rechazado recursos de Marti Coll y pidió a la Corte Suprema de Justicia de Tucumán que revise el pronunciamiento de la Cámara de Familia (se informa por separado).
Rojas y Valderrábano de Casas reprocharon la conducta procesal de Tulia Snopek, que faltó a la audiencia de conciliación que aquellos habían convocado en diciembre. Los camaristas consideraron que la pareja de Morales había incurrido en contradicción con sus propios actos puesto que el 9 de marzo de 2018 solicitó el divorcio ante la jueza tucumana Claudia López, pero, luego, desistió, y el 16 de abril presentó la demanda con idéntico objeto en Jujuy. Días después, Marti Coll revivió el proceso inicial. Según el tribunal, está acreditado que el segundo juicio empezó antes de que López emitiera la sentencia de desistimiento, y que la demandante dijo primero que el domicilio conyugal estaba en Tucumán y, a continuación, que se había domiciliado con Marti Coll en Jujuy.
“Haciendo caso omiso de la normativa aplicable y de los hechos por ella misma reconocidos, la señora Snopek decidió iniciar un nuevo juicio de divorcio ante el Poder Judicial de Jujuy. En ese proceso no sólo se abstuvo de poner en conocimiento la existencia del presente litigio (abierto en el Juzgado de López), sino que, además, contradijo el domicilio que antes había denunciado en Tucumán”, observaron Rojas y Valderrábano de Casas. El tribunal consideró que, en estas circunstancias controvertidas, correspondía desde el punto de vista legal privilegiar lo dicho en el primer pleito y tomar como parámetro el lugar de residencia de Marti Coll, que es Tucumán, para determinar la competencia.
Los jueces, que impusieron las costas del recurso a Tulia Snopek, expresaron que la observancia de las reglas relativas a los tribunales competentes hacía a la tutela de los principios constitucionales del juez natural y de la defensa en juicio. “La atribución de la competencia por ley evita las especulaciones. Todo está dicho en la norma sancionada antes de los hechos. De esta manera, los individuos conocen las consecuencias de sus actos. Esas normas no pueden ser quebradas”, añadieron Rojas y Valderrábano de Casas.
Acusaciones mutuas
La sentencia favorable a la competencia local de la Cámara de Familia se suma a la que previamente había emitido con el mismo sentido el juez de Instrucción en lo Penal de esta ciudad, Facundo Maggio. Ese magistrado reclamó la inhibición de su par Isidoro Cruz en la tramitación de una denuncia que formuló Tulia Snopek contra su todavía marido por la supuesta retención indebida de una camioneta Audi Q3. Cruz se opuso, pero la sustanciación del expediente penal siguió adelante: el juez incluso autorizó la elevación a juicio requerida por el fiscal Aldo Lozano. Ante la falta de novedades sobre ese conflicto de competencia, que debería ser resuelto por la Corte de la Nación, el 28 de febrero Maggio envió un exhorto a la Cámara de Apelaciones y de Control de Jujuy para que informe la situación del caso.
Las desavenencias entre Tulia Snopek y Carlos Marti Coll constan en numerosos procesos judiciales. La disputa trascendió públicamente el año pasado, cuando el senador justicialista, rival político de Morales y hermano de la primera dama, Guillermo Snopek, manifestó en la Cámara Alta que el gobernador usaba la Justicia de su provincia para fines particulares, y puso como ejemplo el caso del ciudadano tucumano que aún es su cuñado. En ese momento, Marti Coll estaba prófugo: Cruz había dictado la orden de detenerlo por pedido del fiscal Lozano, quien también solicitó la citación de la madre del abogado, Victoria Hill Terán. Escondido, el letrado manifestó que Morales había armado la causa de la camioneta para “quebrarlo” y obligarlo a renunciar a sus pretensiones patrimoniales. Marti Coll, quien dijo haber sido víctima de espionaje ilegal, reclama su parte sobre U$S 600.000 existentes en una caja de seguridad a nombre de Tulia Snopek, entre otros bienes.
Morales y Saade, la letrada de Tulia Snopek, sostuvieron por separado que, en realidad, los extorsionados eran ellos. “Yo no manejo la Justicia de Jujuy”, definió el gobernador en noviembre. Y añadió: “el círculo de Guillermo sí presionaba a los jueces y sí garantizaba la impunidad, y, por ello, debería estar preso. Este tema privado me parece bochornoso y hasta indigno: están llevando a una mujer ante un tribunal de la inquisición. Marti Coll es un despechado que anda ventilando cuestiones de plata… Me preocupa la impronta machista que se antepone a la voluntad de una mujer que quiere divorciarse, y que está amparada por un Código Civil y Comercial que le da la posibilidad de romper el vínculo de manera unilateral”. Impedidos de contraer enlace civil, Morales y Tulia Snopek se unieron por medio de un ritual indígena el 6 de diciembre pasado.