BUENOS AIRES.- Una falla de un operador de Migraciones franqueó la entrada al país a una pareja de iraníes detenida el viernes a la noche, cuya identidad todavía no pudo ser confirmada, por haber ingresado con pasaportes israelíes que fueron robados.
No obstante, y aunque eso bastaba para disponer que la pareja -un hombre y una mujer- fuera demorada y quedara a disposición de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, el operador les permitió el ingreso al país debido a que el sistema, a través de las huellas dactilares, no arrojó que los sospechosos visitantes tuvieran antecedentes o figuraran en alguna lista de presuntos terroristas en cualquiera de las agencias de inteligencia internacionales, detalla La Nación, citando según dijeron calificadas fuentes gubernamentales.
Se informó que fue allanada la casa del agente migratorio que les permitió el paso a los dos sospechosos. En el lugar no se encontró ningún indicio que lo vincule con los iraníes o con cualquier situación parecida al terrorismo.
La aparición de los pasaportes robados en la Argentina también fue advertida por Interpol, ya que el sistema I24-7 lo reportó en cuanto ocurrió. No obstante, la situación fue puesta en conocimiento de la Justicia recién el jueves 14, luego de las corroboraciones hechas por Interpol Jerusalén. Desde entonces, 80 brigadas de la Policía Federal se lanzaron a buscar a los sospechosos, que pasaron por tres hoteles (en uno estuvieron 12 horas, en otro, 24) hasta que llegaron al apart hotel de Lavalle al 3.000, en la zona del Abasto, donde agentes del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) los detuvo el viernes a la noche.
Sajjad Samiel Naserani, ciudadano iraní, nacido el 1º de noviembre de 1991 (27 años) en la ciudad de Rasht, que dijo ser fotógrafo, y Mashoreh Sabzali, también iraní, nacida en Mashhad, el 4 de abril de 1988 (30 años), de profesión arquitecta e ingeniera, ingresaron a la Argentina desde España. En los pasaportes se hacían llamar Netanel Toledano y Rivka Toledano.
A pesar de los nombres y las identidades que dieron, no existe ninguna constancia de que efectivamente sean iraníes y se llamen Naserani y Sabzali. Sus huellas dactilares no arrojaron ningún resultado en ninguna base de datos de aquellas que están interconectadas a través de los sistemas de cooperación internacional, como las que maneja Interpol.
Disidentes
Tampoco se pudo comprobar que, como dijeron, sean disidentes que escaparon de Irán hacia Turquía, de allí a Grecia (de donde los expulsaron por haber entrado ilegalmente) y luego, a España, donde -según su propio relato- compraron los cuatro pasaportes a los que les insertaron sus fotos. Usaron dos pasaportes para salir de España y otros dos para entrar en la Argentina.
Mostraron en uno de sus teléfonos (un iPhone) una imagen del presunto documento real de uno de ellos. Pero no dieron la clave para poder desbloquear el aparato. También dijeron tener el contacto de un abogado argentino, aunque por ahora no dieron su nombre.
La pareja fue trasladada mañana a primera hora desde la Alcaidía de Interpol (en Cavia y Figueroa Alcorta) a los tribunales de Comodoro Py, donde fueron puestos a disposición del juez federal Luis Rodríguez, que les toma declaración justo el día que se conmemora el 27° aniversario del atentado terrorista contra la embajada de Israel en Buenos Aires.