En apenas cuatro días, Atlético jugó sus partidos de la fecha 15 y 20. Claro, no es que haya jugado seis partidos en ese lapso sino que la reorganización de su fixture lo obligó a jugar dos entre miércoles y domingo. Aquel superclásico en la final de la Copa Libertadores jugada en diciembre, terminó influyendo en este momento del “Decano”.
El equipo de Ricardo Zielinski debía jugar contra Boca el 9 de diciembre pasado y por el partido contra River, lo reprogramaron para el 20 de febrero. Ese día, jugó ante el subcampeón de América y le ganó en la mismísima Bombonera. El domingo por la noche, recibió al peor equipo de la Superliga y no pudo siquiera marcarle un gol. Una situación tan extraña como la programación de los partidos por parte de la Superliga pero no tanto para Atlético.
El equipo volvió a tropezar con un equipo que ronda los últimos puestos del torneo. Primero fue San Martín, el año pasado. El “Decano” ganaba 2-0 en su propia cancha al comenzar el segundo tiempo y terminó perdiendo 2-3 en la derrota más dolorosa de la temporada.
Este año la siguió con Patronato, otro equipo que -aligual que el “Santo”- está penúltimo y por ahora descendiendo. Acá la derrota fue aún peor y sin atenuantes: 0-3 en Paraná.
El domingo fue Argentinos, abajo de todos en la tabla. Arriba, no perdió con ninguno: empató con Racing y Defensa y Justicia (estuvo a punto de ganarles a los dos) y derrotó a Boca, el tercer equipo del podio de la actual Superliga.
“La conclusión es que todos los partidos son difíciles. No hay misterios en esto y no voy a descubrir nada pero todo es muy parejo”, avisa Cristian Lucchetti que obviamente hubiese disfrutado de un triunfo ante el “Bicho” pero pareció resignado ante el 0-0. “No tenemos los mismos planteles de los equipos grandes que meten mano y pueden poner 11 jugadores nuevos. Acá el entrenador se tiene que arreglarse con lo que tiene”, explica. Aún con ese panorama, Atlético se las arregló para pelear el torneo en un momento y ahora -ya salvado del descenso- quiere intentar seriamente terminar entre los cuatro y meterse a la Copa Libertadores 2020.
“Somos un equipo con mucho sacrificio y voluntad. El año pasado sacamos una buena diferencia de puntos que nos mantiene pero no fue normal. Para el presupuesto que tenemos no lo es”, insiste el “Laucha” que en carne propia sufrió los embates de un equipo que estuvo a punto de marcarle. Justo el que menos anotó en toda la temporada: apenas ocho goles en 20 partidos.
Atlético se puso en la posición de ganarse ese boleto a la Libertadores en el terreno más complicado pero en el que parece sentirse cómodo: las cinco próximas fechas las jugará ante cinco equipos que están en la mitad superior de la tabla: Banfield, River, Vélez, Aldosivi y Huracán. Ante ellos deberá ratificar que mientras mayor es el desafío, mejor le va.